El Yen japonés (JPY) se fortalece frente al Dólar estadounidense (USD) el viernes, con el USD/JPY rompiendo una racha ganadora de cuatro días después de que nuevas advertencias verbales de intervención de Tokio provocaran una leve toma de beneficios. Al momento de escribir, el par cotiza alrededor de 156.54, suavizándose modestamente desde el máximo cercano a diez meses del jueves alrededor de 157.89, aunque sigue en camino de asegurar un segundo avance semanal consecutivo.
El Ministerio de Finanzas de Japón reiteró que las autoridades están listas para actuar contra movimientos excesivos de la moneda, señalando un creciente malestar con el ritmo de depreciación del Yen. Las advertencias llegan mientras el Yen se mantiene cerca de niveles donde Tokio intervino en el pasado. Al mismo tiempo, el gobernador del Banco de Japón (BoJ), Kazuo Ueda, ha reconocido que el Yen débil está ejerciendo presión al alza sobre los precios, alimentando las expectativas de que los responsables de la política monetaria podrían discutir la viabilidad de endurecer la política tan pronto como en diciembre.

Desde una perspectiva técnica, el USD/JPY está mostrando los primeros signos de fatiga después de no poder mantenerse por encima de 157.50, con el retroceso del viernes marcando la fase inicial de enfriamiento de un rally de otro modo agresivo. El gráfico diario muestra que el precio se está suavizando desde territorio de sobrecompra, con el Índice de Fuerza Relativa (RSI 14) deslizándose de cerca de 70 a alrededor de 66, lo que sugiere un desvanecimiento del momentum alcista pero aún no señalando una reversión completa. El momentum también se mantiene por encima de la línea cero y ha comenzado a suavizarse, indicando que la presión de compra sigue en su lugar pero se está moderando gradualmente.
Sin embargo, la estructura de la tendencia más amplia sigue siendo constructiva. El par continúa cotizando cómodamente por encima de las medias móviles clave, con la media móvil simple (SMA) de 21 días cerca de 154.30 proporcionando la primera capa de soporte dinámico, seguida por la SMA de 50 días alrededor de 151.60. Mientras estas zonas se mantengan, las caídas probablemente atraerán nuevo interés de compra.
La resistencia inicial ahora se ve en el máximo del jueves alrededor de 157.89, seguida por la zona psicológica de 158.00. Un cierre decisivo por encima de esta zona reabriría el camino hacia el área de 160.00, un nivel ampliamente observado por los operadores dada la elevada posibilidad de intervención oficial.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.