El Yen japonés (JPY) continúa con su relativo bajo rendimiento durante la sesión asiática del martes y cae a un nuevo mínimo desde principios de febrero frente a un Dólar estadounidense (USD) más firme. Informes indican que la Primera Ministra de Japón, Sanae Takaichi, planea recortes de impuestos para impulsar el consumo, lo que añade preocupaciones sobre la salud fiscal a largo plazo del gobierno. Esto se suma a la débil impresión del PIB del tercer trimestre de Japón publicada el lunes y podría ejercer presión adicional sobre el Banco de Japón (BoJ) para retrasar el aumento de las tasas de interés, lo que, a su vez, se considera un factor clave que socava al JPY.
Mientras tanto, la reciente caída del JPY provocó cierta intervención verbal por parte de la Ministra de Finanzas de Japón, Satsuki Katayama. Esto, junto con una nueva ola de aversión al riesgo global, está frenando a los operadores de realizar apuestas bajistas agresivas en torno al JPY, considerado refugio seguro. El USD, por otro lado, atrae algo de compra adicional en medio de expectativas menos dovish de la Reserva Federal (Fed) y debería actuar como un viento de cola para el par USD/JPY mientras los inversores esperan la publicación de las minutas del FOMC y el retrasado informe de Nóminas no Agrícolas (NFP) de EE.UU. esta semana.

Desde una perspectiva técnica, el cierre de la noche anterior por encima de la marca psicológica de 155.00 podría verse como un nuevo desencadenante para los alcistas del USD/JPY. Además, los osciladores en el gráfico diario se mantienen en territorio positivo y aún están lejos de estar en la zona de sobrecompra, lo que sugiere que el camino de menor resistencia para los precios al contado sigue siendo al alza. Por lo tanto, cierta fuerza adicional más allá del obstáculo intermedio de 155.60-155.65, hacia la recuperación de la cifra redonda de 156.00, parece una posibilidad distinta.
Por el contrario, cualquier retroceso correctivo por debajo de la marca de 155.00 es más probable que encuentre un soporte decente y atraiga nuevos compradores cerca de la región de 154.50-154.45. Esta última debería actuar como un punto clave, que, si se rompe de manera decisiva, podría provocar algunas ventas técnicas y arrastrar al par USD/JPY hacia la cifra redonda de 154.00. La caída podría extenderse aún más hacia el siguiente soporte relevante cerca de la región de 153.60-153.50 en dirección a la marca de 153.00.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.