El USD/MXN ha repuntado este miércoles tras seis días previos de pérdidas. El par ha abierto la jornada probando un mínimo diario en 17.94, y posteriormente ha operado en un estrecho rango que se ha extendido a un máximo de dos días en 18.02 en la sesión americana.
Al momento de escribir, el USD/MXN cotiza sobre 18.01, ganando un 0.30% en el día.
El clima de aversión al riesgo que domina los mercados tras los sombríos datos de empleo estadounidenses publicados ayer, ha provocado que el Índice del Dólar (DXY) repunte hoy a 98.64, su nivel más alto en cuatro días. Otros activos refugio seguro, como el Oro, también han experimentado subidas.
Christopher Waller, miembro de la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal de Estados Unidos, ha asegurado hoy que la Fed no tiene prisa por seguir recortando las tasas de interés, dado el panorama actual. Sus palabras han impulsado al Dólar, pero han generado inquietud antes de la publicación mañana jueves de los datos de inflación de Estados Unidos de noviembre, que se espera permanezca sin cambios en el 3% anual tanto en la tasa general como en la subyacente.
Mañana jueves México publicará sus cifras de ventas minoristas de octubre, y unas horas después Banxico dará a conocer su decisión sobre las tasas de interés. La inesperada subida de la inflación de noviembre al 3.80% podría poner en duda la trayectoria flexibilizadora del banco central de México, por lo que el evento podría generar una mayor volatilidad en el USD/MXN.
Se espera, en todo caso, que Banxico recorte las tasa de interés en 25 puntos básicos al 7% desde el 7.25% actual. En caso de cumplirse la previsión, el banco central presentaría sus tipos más bajos desde mayo de 2022.
México ha publicado hoy el Indicador Oportuno del Consumo Privado, anticipando un aumento anual del consumo privado del 3.2% en octubre y del 2.6% en noviembre.
La tendencia se mantiene firmemente bajista en todas las temporalidades. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días se muestra por encima de 60 en el gráfico de una hora y por debajo de 50 en 4 horas y un día, lo que sugiere que se puede extender la actual subida a muy corto plazo.
La resistencia inicial está sobre el área de 18.30, techo de la pasada semana. Por encima hay una importante barrera en la franja de 18.47/18.53, donde confluyen la media móvil simple de 100 días en el gráfico diario y los máximos de finales de noviembre. Más arriba esperaría el techo de noviembre en 18.77.
A la baja, el soporte inicial está en el mínimo de casi 17 meses probado ayer en 17.92. Por debajo, el soporte principal del USD/MXN espera en 17.60, suelo de julio de 2024. Un quiebre de este nivel podría provocar una caída a la región psicológica de 17.00 y a los alrededores de 16.50, donde están los mínimos de mayo de 2024.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.