El Euro (EUR) se desliza ligeramente a la baja frente al Dólar estadounidense (USD) durante la sesión americana del martes, después de haber subido brevemente por encima de la marca de 1.180 más temprano en el día, su nivel más alto desde septiembre de 2021. El Euro encontró soporte en señales de que la inflación en la Eurozona se está estabilizando, lo que aumenta la confianza de los inversores en las perspectivas económicas de la región.
En el momento de escribir, el EUR/USD se encuentra rondando 1.1773, ligeramente por debajo del máximo intradía de 1.1830, ya que el Dólar estadounidense recorta pérdidas anteriores tras datos económicos positivos de EE.UU. El Índice de Gerentes de Compras (PMI) de manufactura del ISM y las ofertas de empleo JOLTS sorprendieron al alza, ayudando al Dólar a recuperar algo de terreno.
El PMI de manufactura del ISM subió a 49 en junio desde 48.5 en mayo, ligeramente por encima de la previsión de 48.8. Aunque sigue por debajo de la marca de 50, la lectura apunta a un ritmo más lento de declive en la actividad fabril. Por separado, el mercado laboral de EE.UU. mostró una renovada fortaleza, ya que las ofertas de empleo JOLTS aumentaron en 374.000 hasta 7.769 millones en mayo, el nivel más alto desde noviembre de 2024 y muy por encima de los 7.3 millones esperados.
Tras la publicación de los datos, el Índice del Dólar estadounidense rebotó desde su mínimo intradía de 96.38 y ahora se cotiza alrededor de 96.82, ya que el Dólar recuperó algo de impulso.
Más temprano el martes, nuevos datos de la Eurozona pintaron un cuadro ligeramente más optimista. El PMI de manufactura de HCOB de la Eurozona subió a 49.5 en junio desde 49.4 en mayo, alcanzando su nivel más alto en casi tres años. En el frente de la inflación, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) general aumentó al 2.0% interanual en junio, desde el 1.9% en mayo y en línea con las expectativas, coincidiendo con el objetivo del Banco Central Europeo (BCE). La inflación subyacente se mantuvo sin cambios en el 2.3%, el nivel más bajo desde enero de 2022.
En el foro anual del BCE en Sintra, Portugal, la presidenta Christine Lagarde reconoció que la inflación ahora está en el objetivo, pero advirtió que los riesgos siguen siendo "bilaterales". Señaló la creciente incertidumbre global, el aumento de las tensiones geopolíticas y los cambios en la forma en que las empresas establecen precios como razones por las cuales la inflación se ha vuelto más difícil de predecir. Lagarde dijo que el BCE ahora se centrará más en varios escenarios posibles al tomar decisiones de política, en lugar de depender únicamente de las previsiones centrales.
El BCE también confirmó su compromiso con el objetivo de inflación del 2% a medio plazo, pero añadió que necesita ser más flexible al tratar con un entorno global más impredecible.
De cara al futuro, los inversores estarán atentos a los comentarios del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, durante el foro de Sintra. La atención ahora se centra en el informe de Nóminas No Agrícolas (NFP) del jueves, que podría influir en el próximo movimiento de política de la Fed.