El Yen japonés (JPY) se basa en el fuerte movimiento del día anterior contra un Dólar estadounidense (USD) ampliamente más débil y gana algo de tracción positiva de seguimiento por segundo día consecutivo el jueves. Un cambio en la retórica del gobernador del Banco de Japón (BoJ), Kazuo Ueda, al decir que el banco central se está acercando a lograr de manera sostenible el objetivo de inflación anual del 2%, elevó las apuestas por una inminente subida de tasas tan pronto como la próxima semana. Esto marca una divergencia significativa en comparación con el recorte de tasas dovish de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) el miércoles, que se considera que socava al Dólar y resulta ser un factor clave detrás del relativo rendimiento superior del JPY.
Mientras tanto, el aumento del gasto fiscal bajo la administración de la primera ministra Sanae Takaichi ha exacerbado las preocupaciones sobre las finanzas públicas de Japón. Esto, junto con un tono generalmente positivo en torno a los mercados de renta variable, podría actuar como un viento en contra para el JPY de refugio seguro. Los operadores alcistas también podrían abstenerse de realizar apuestas agresivas en torno al JPY y optar por esperar más señales sobre el camino de endurecimiento de la política del BoJ. Por lo tanto, la atención sigue centrada en el resultado de la reunión de política del BoJ del 18-19 de diciembre, que influirá en la dinámica del precio del JPY a corto plazo. De cara al riesgo del evento clave del banco central, el contexto fundamental podría seguir apoyando al JPY.

Un quiebre intradía por debajo de la marca de 156.00 y la media móvil simple (SMA) de 100 horas respalda el caso para más pérdidas en medio de osciladores negativos en gráficos horarios. Dicho esto, los indicadores técnicos en el gráfico diario se mantienen en territorio positivo y sugieren que cualquier caída adicional es más probable que atraiga a algunos compradores cerca del punto de ruptura de 155.35-155.30. Este último representó el límite superior de un rango de negociación a corto plazo y debería actuar como un punto clave. Algunas ventas de seguimiento, que lleven a una caída posterior por debajo de la marca psicológica de 155.00, podrían cambiar el sesgo a corto plazo a favor de los bajistas del USD/JPY.
Por el contrario, una fortaleza sostenida por encima de la marca de 156.00 podría elevar los precios al contado a la región de 156.60-156.65 en ruta hacia el vecindario de 157.00, o un máximo de dos semanas alcanzado el martes. Algunas compras de seguimiento deberían allanar el camino para ganancias adicionales. El par USD/JPY podría entonces superar el obstáculo intermedio de 157.45 y apuntar a desafiar un máximo de varios meses, alrededor del vecindario de 158.00, alcanzado en noviembre.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.