La Libra esterlina (GBP) cotiza tranquilamente frente a sus principales pares de divisas al inicio de la semana, rondando alrededor de 1.3320 frente al Dólar estadounidense (USD). En una semana en la que el calendario económico del Reino Unido (UK) es ligero, se espera que la moneda británica se vea influenciada por eventos globales y las expectativas del mercado sobre la perspectiva de política monetaria del Banco de Inglaterra (BoE).
Los operadores están seguros de que el BoE recortará las tasas de interés en la reunión de política la próxima semana en medio de débiles condiciones del mercado laboral del Reino Unido y señales de una desaceleración en la inflación. Los datos del mercado laboral para los tres meses que terminaron en septiembre mostraron que la Tasa de Desempleo aumentó al 5%. Mientras tanto, el informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC) para octubre mostró que la inflación se situó en 3.6% en términos anuales, el nivel más bajo en cuatro meses.
Para obtener más pistas sobre la perspectiva de política monetaria, los inversores se centrarán en el discurso del miembro externo del Banco de Inglaterra (BoE), Alan Taylor, que está programado para las 14:30 GMT.

La Libra esterlina cotiza plana alrededor de 1.3320 frente al Dólar estadounidense el lunes. El par se mantiene por encima de una media móvil exponencial (EMA) de 20 días en 1.3227, manteniendo un sesgo positivo a corto plazo. La EMA de 20 días ha ido en aumento en las sesiones recientes, y las caídas siguen siendo superficiales.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días en alrededor de 60 refleja un impulso alcista.
El impulso sigue siendo favorable ya que el precio se mantiene por encima de la EMA de 20 días en aumento. Un cierre diario por encima del retroceso de Fibonacci del 50% en 1.3402 reforzaría el tono alcista y abriría espacio hacia el máximo del 17 de octubre de 1.3471. Por el contrario, la incapacidad para superar esa barrera mantendría al par consolidándose, con retrocesos inclinándose hacia el área del 38.2% de Fibonacci y el soporte de tendencia en 1.3310.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo