El Banco de Japón (BOJ) celebrará su Comité de Política Monetaria (CPM) el martes 23 de enero. Les ofrecemos las expectativas previstas por los economistas e investigadores de ocho grandes bancos. El BoJ publicará al mismo tiempo sus Perspectivas de la Actividad Económica y de los Precios, es decir, su Informe de Perspectivas.
Los participantes del mercado no prevén ningún cambio en el Control de la Curva de Rendimiento (YCC) ni en la política monetaria, ya que los recientes acontecimientos ponen al Banco de Japón en una situación difícil para abogar por cualquier cambio significativo en su política monetaria ultra flexible.
Se espera que el BoJ mantenga su política de YCC y de tasas negativas a corto plazo en su reunión de enero. Es probable que la inflación siga desacelerándose en enero y que prevalezca la cautela tras el reciente terremoto.
Esperamos que el BoJ se mantenga moderado teniendo en cuenta (1) la reciente relajación de la inflación medida por el IPC, (2) la probable orientación moderada de la política monetaria de la Fed de EE.UU., (3) la estabilidad del yen japonés (JPY), (4) el modesto crecimiento interno y (5) el impacto económico del terremoto de principios de enero. No prevemos una desviación de su marco actual en la reunión de enero. El YCC muestra actualmente suficiente flexibilidad para acomodarse a las fluctuaciones de los mercados con efectos mínimos. Creemos que el BoJ sólo se planteará normalizar la política cuando la tendencia del crecimiento sea más sólida y la inflación se vea impulsada por el crecimiento de los salarios y los factores de demanda. La normalización de las tasas negativas y los ajustes del YCC también dependerán probablemente de señales tangibles de crecimiento salarial, con un posible plazo hasta abril de 2024 tras las negociaciones salariales de primavera.
Esperamos que el banco central mantenga su actual política monetaria, pero a más largo plazo creemos que el Banco de Japón abandonará su política de tipos de interés negativos en abril.
Esperamos una decisión sobre las tasas sin cambios. El crecimiento de los salarios sigue siendo la pieza que falta en el rompecabezas antes de que el Banco de Japón pueda contemplar subidas de tasas y abandonar la curva de rendimiento, pero probablemente tendremos que esperar a las negociaciones salariales de primavera para obtener pruebas contundentes.
Esperamos que el BoJ mantenga su política de fijación de tasas. Seguimos esperando un ciclo de subidas de tipos muy gradual a partir de mediados de 2024, cuando el BoJ tenga más información sobre la evolución de los salarios y la inflación.
Los recientes acontecimientos (por ejemplo, terremotos/escándalos políticos) ponen al BoJ en una situación difícil para propugnar cualquier cambio significativo de política. Contamos con nuevas previsiones y esperamos que el Banco de Japón revise a la baja su previsión de IPC subyacente hasta el 2,5% para el AF2024 frente al 2,8% anterior y mantenga el AF2025 en el 1,8%. La atención se centrará en el AF2025, ya que si el BOJ planea señalar alguna salida inminente, probablemente lo elevaría a >2%.
Esperamos que el BoJ mantenga su política monetaria actual en enero. Esperamos que las previsiones del IPC subyacente (excluidos únicamente los alimentos frescos) para el ejercicio fiscal de 24 años disminuyan del +2,8% registrado en octubre al +2,5%. Sin embargo, es probable que las previsiones del IPC subyacente para el EF25 y las del IPC subyacente más subyacente (IPC excluidos los alimentos frescos y la energía) se mantengan prácticamente sin cambios con respecto a octubre. De cara al futuro, seguimos pensando que es poco probable que el Banco de Japón confíe plenamente en la consecución sostenible y estable de su objetivo de precios del 2% para abril de este año. También es improbable que suprima el YCC y las tasas negativas para el mismo periodo de tiempo.
Esperamos que el Banco de Japón mantenga su tasa de interés oficial en el -0,10% y que no modifique su política de control de la curva de rendimiento. En la medida en que el BOJ destaque la importancia de las negociaciones salariales de primavera y ofrezca comentarios positivos sobre las perspectivas salariales para 2024, así como mantenga o aumente sus previsiones de inflación subyacente a medio plazo, pensamos que la posibilidad de una subida de los tipos de interés en abril sigue sobre la mesa.