Los nuevos esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra en Ucrania han estado ejerciendo presión sobre los precios del petróleo desde finales de la semana pasada, señala Carsten Fritsch, analista de materias primas de Commerzbank.
"Durante el fin de semana, EE.UU. y Ucrania alcanzaron un acuerdo en Ginebra sobre un plan para poner fin a la guerra, que difiere en algunos aspectos del plan de 28 puntos negociado anteriormente con Rusia. Los detalles aún no son conocidos. También es incierto si Rusia aceptará este plan. El Kremlin ya ha rechazado una propuesta separada de la UE, sembrando dudas sobre una solución y provocando que los precios del petróleo volvieran a subir ayer."
"Si se llega a un acuerdo de paz, las sanciones al petróleo contra Rusia también podrían ser levantadas. Esto afectaría particularmente a las sanciones de EE.UU. contra las dos mayores compañías petroleras rusas, que entraron en vigor el jueves pasado. Como resultado de estas sanciones, las refinerías en India y China anunciaron que ya no comprarían petróleo ruso, lo que llevó a una disminución en las exportaciones de petróleo ruso y un aumento en el petróleo crudo de Rusia almacenado en buques en el mar. Este petróleo volvería a estar disponible."
"Además, los ataques mutuos de Rusia y Ucrania a la infraestructura energética probablemente llegarían a su fin. Los ataques a las refinerías también han llevado a una notable interrupción en los suministros de petróleo ruso, particularmente para los productos petroleros. La fuerte caída en el diferencial de gasóleo, que ha caído 10 USD por barril desde el máximo del jueves pasado, se debe en gran medida a las esperanzas de que la guerra en Ucrania podría llegar pronto a su fin."