Después de que la votación tuviera que repetirse en la reunión anterior para llegar a una decisión - un acontecimiento novedoso - y tras haberse observado un comportamiento de votación bastante inusual en reuniones anteriores, la reunión del Banco de Inglaterra de ayer transcurrió como un reloj, señala el analista de FX de Commerzbank, Michael Pfister.
"Como se esperaba, las tasas de interés se mantuvieron sin cambios, con siete votos a favor de mantenerlas y dos a favor de recortarlas en 25 puntos básicos. Incluso la decisión sobre la reducción del balance financiero fue en gran medida predecible."
"En cuanto a decisiones futuras, los responsables de políticas no revelaron sus intenciones, lo que llevó a que no hubiera cambios significativos en las expectativas de tasas de interés. En resumen, la decisión de ayer no fue un cambio importante para la libra."