En la reunión entre el Presidente ruso Putin y su homólogo chino Xi, ambos países acordaron aumentar las entregas de gas en el futuro. Por un lado, se aumentarán las entregas a través de los gasoductos existentes, señala la analista de materias primas de Commerzbank, Barbara Lambrecht.
"La capacidad de 'Poder de Siberia 1' se aumentará de los actuales 38 mil millones de metros cúbicos a 44 mil millones de metros cúbicos, y la del gasoducto del Lejano Oriente en un 20% a 12 mil millones de metros cúbicos. Por otro lado, se construirá un gasoducto de tránsito adicional a través de Mongolia, 'Poder de Siberia 2', que transportará 50 mil millones de metros cúbicos de gas natural desde la Península de Yamal en Siberia Occidental hacia China. Esto correspondería a la capacidad de transporte de Nord Stream 1."
"Aunque este proyecto aún debe ser finalizado, parece que los dos países se volverán aún más dependientes el uno del otro, con China recibiendo precios favorables. En los últimos años, China se ha convertido en un cliente cada vez más importante para el gas ruso. Según la Administración de Información Energética de EE.UU. (EIA), China importó alrededor de 2,5 veces más gas de Rusia el año pasado que en 2021."
"Esto significa que el país ahora representa un buen cuarto de las exportaciones de gas ruso, frente al 7% en 2021. Según cifras del Instituto de Energía, China ya obtuvo poco menos del 22% de sus importaciones de gas y el 37% de sus importaciones por gasoducto de Rusia el año pasado. Europa se beneficiaría porque los requisitos de importación de GNL de China, el mayor importador de GNL del mundo, se reducirían significativamente tras la construcción de 'Poder de Siberia 2."