El precio del Gas Natural se encuentra en una tendencia alcista a corto plazo, como demuestra la secuencia ascendente de máximos y mínimos en el gráfico de 4 horas, y el hecho de que cotiza por encima de todas sus medias móviles clave.
Teniendo en cuenta el viejo adagio de que "la tendencia es tu amiga", es probable que la materia prima continúe subiendo en el horizonte a corto plazo (hasta 6 semanas) a menos y hasta que la evidencia sugiera lo contrario.
El RSI ha estado fluctuando en extremos de sobrecompra desde el 3 de mayo y mostrando constantemente divergencia bajista con el precio. Esto ocurre cuando el precio alcanza nuevos máximos, pero el RSI no hace lo mismo. Es un signo de debilidad subyacente.
El RSI acaba de salir de la sobrecompra y ha vuelto a entrar en territorio neutral durante la última barra, dando una señal de venta. Junto con el retroceso de los precios, sugiere la posibilidad de que se produzca una corrección más profunda.
Sin embargo, es probable que la zona de soporte entre 2.42$ y 2.32$ MMBtu apuntale cualquier caída y sirva de trampolín para reanudar finalmente la tendencia alcista.
Tras la corrección, es probable que el Gas Natural continúe hacia nuevos máximos en línea con la tendencia alcista dominante. Una ruptura por encima del nivel de 2.50$ MMBtu indicaría una continuación al alza, potencialmente hasta un objetivo inicial en torno a 2.60$ MMBtu.
Si el precio del Gas Natural rompe por debajo de 2.32$ MMBtu, la tendencia alcista quedaría en entredicho y se sugeriría la posibilidad de que se haya producido una reversión y se esté iniciando una nueva tendencia bajista. En tal escenario, se favorecerían las posiciones cortas frente a las largas.