El cruce GBP/JPY cotiza en territorio positivo por tercer día consecutivo cerca de 197.95 durante la sesión europea del lunes. El Yen japonés (JPY) se debilita frente a la Libra esterlina (GBP) ya que la preferencia del Banco de Japón (BoJ) de avanzar con cautela en la normalización de una política monetaria aún laxa obliga a los operadores a retrasar sus apuestas sobre el probable momento del próximo aumento de tasas de interés hasta el primer trimestre de 2026.
Técnicamente, el GBP/JPY mantiene la vibra alcista en el gráfico diario, con el precio manteniéndose por encima de la clave media móvil exponencial (EMA) de 100 días. El camino de menor resistencia es al alza, ya que el Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días se sitúa por encima de la línea media cerca de 64.50. Esto sugiere un impulso alcista en el corto plazo.
El primer objetivo al alza a vigilar para el cruce se observa en 198.81, el máximo del 25 de julio de 2024. Las ganancias extendidas podrían ver un repunte hacia el nivel psicológico de 200. Más al norte, el siguiente obstáculo se encuentra en 203.62, el máximo del 22 de julio de 2024.
Por otro lado, el nivel de soporte inicial para el GBP/JPY surge en 194.34, el mínimo del 18 de junio. Una ruptura de este nivel podría exponer el nivel de contención clave en la zona de 193.30-193.20, que representa la EMA de 100 días y el límite inferior de la Banda de Bollinger. El filtro adicional a la baja a vigilar es 191.90, el mínimo del 22 de mayo.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.