El Dólar neozelandés está cotizando a la baja por sexto día consecutivo frente a un Dólar estadounidense algo más fuerte. El par extiende su reversión desde los máximos de la semana pasada por encima de 0.5850 hasta mínimos diarios en 0.5763 hasta ahora.
El Dólar estadounidense está recibiendo apoyo de la publicación de las minutas del FOMC, que revelaron una amplia divergencia entre los miembros del comité y generaron dudas sobre el momento del próximo movimiento de relajación monetaria.
La mayoría de los participantes votaron a favor de recortar las tasas de interés en un cuarto de punto el 10 de diciembre, con tres funcionarios pidiendo mantener las tasas, registrando el mayor número de disidentes desde 2019.
Las minutas de la reunión revelaron que la mayoría del comité coincidió en la conveniencia de reducir los costos de endeudamiento para apoyar un mercado laboral en deterioro, pero condicionaron futuros recortes de tasas a una disminución constante de las presiones inflacionarias.
El kiwi, por otro lado, no ha logrado obtener un apoyo significativo de las cifras optimistas de actividad empresarial de China, el principal socio comercial de Nueva Zelanda. Las cifras del PMI de NBS de China revelaron que la actividad manufacturera en la principal economía asiática mejoró 0.9 puntos a 50.1. Asimismo, el PMI no manufacturero subió 0.7 puntos a 50.2, ambos regresando a niveles consistentes con una leve expansión.
El Dólar neozelandés (NZD), también conocido como kiwi, es una divisa muy conocida entre los inversores. Su valor viene determinado en gran medida por la salud de la economía neozelandesa y la política del banco central del país. Sin embargo, existen algunas particularidades que también pueden hacer que el NZD se mueva. La evolución de la economía china tiende a mover el Kiwi porque China es el mayor socio comercial de Nueva Zelanda. Las malas noticias para la economía china probablemente se traduzcan en menos exportaciones neozelandesas al país, lo que afectará a la economía y, por tanto, a su divisa. Otro factor que mueve al NZD son los precios de los productos lácteos, ya que la industria láctea es la principal exportación de Nueva Zelanda. Los altos precios de los productos lácteos impulsan los ingresos de exportación, contribuyendo positivamente a la economía y, por tanto, al NZD.
El Banco de la Reserva de Nueva Zelanda (RBNZ) aspira a alcanzar y mantener una tasa de inflación de entre el 1% y el 3% a medio plazo, con el objetivo de mantenerla cerca del punto medio del 2%. Para ello, el banco fija un nivel adecuado de tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el RBNZ sube los tipos de interés para enfriar la economía, pero la medida también hará subir el rendimiento de los bonos, aumentando el atractivo de los inversores para invertir en el país e impulsando así al NZD. Por el contrario, unos tipos de interés más bajos tienden a debilitar el NZD. El llamado diferencial de tipos, o cómo son o se espera que sean los tipos en Nueva Zelanda en comparación con los fijados por la Reserva Federal de EE.UU., también puede desempeñar un papel clave en el movimiento del par NZD/USD.
La publicación de datos macroeconómicos en Nueva Zelanda es clave para evaluar el estado de la economía y puede influir en la valoración del Dólar neozelandés (NZD). Una economía fuerte, basada en un elevado crecimiento económico, un bajo desempleo y una elevada confianza es buena para el NZD. Un alto crecimiento económico atrae la inversión extranjera y puede animar al Banco de la Reserva de Nueva Zelanda a aumentar los tipos de interés, si esta fortaleza económica viene acompañada de una inflación elevada. Por el contrario, si los datos económicos son débiles, es probable que el NZD se deprecie.
El Dólar neozelandés (NZD) tiende a fortalecerse durante los periodos de apetito por el riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y se muestran optimistas sobre el crecimiento. Esto suele traducirse en unas perspectivas más favorables para las materias primas y las denominadas "divisas de materias primas", como el kiwi. Por el contrario, el NZD tiende a debilitarse en momentos de turbulencias en los mercados o de incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender los activos de mayor riesgo y huyen a los refugios más estables.