El Yen japonés (JPY) se debilita frente al Dólar estadounidense (USD) el martes, con el USD/JPY extendiendo ganancias por tercer día consecutivo a medida que el Dólar se fortalece tras señales más firmes del mercado laboral. Al momento de escribir, el par se negocia cerca de 156.90, su nivel más alto desde el 25 de noviembre.
Nuevos datos laborales de EE.UU. ayudaron a respaldar al Dólar el martes. El promedio de cuatro semanas del Cambio de Empleo ADP mejoró a 4.75K desde -13.5K, reforzando la opinión de que las condiciones pueden no estar enfriándose tan drásticamente como se temía.
Los datos contrastan con el Cambio de Empleo ADP de la semana pasada, que mostró inesperadamente una disminución de 32,000 para noviembre tras una ganancia revisada de 47,000 en octubre.
Las Ofertas de Empleo JOLTS también superaron las expectativas tanto para septiembre como para octubre. Septiembre registró 7.658 millones de ofertas frente a los 7.2 millones pronosticados y 7.227 millones en el mes anterior, mientras que octubre imprimió 7.67 millones en comparación con el consenso de 7.2 millones.
A pesar de las señales mixtas, los datos hicieron poco para cambiar las expectativas sobre la decisión de tasas de interés de la Reserva Federal (Fed) del miércoles, con los mercados aún convencidos de que el banco central realizará otro recorte de 25 puntos básicos.
Sin embargo, el Dólar también está recibiendo apoyo de las expectativas de un recorte agresivo, con analistas sugiriendo que la Fed podría señalar una larga pausa hasta 2026 mientras los responsables de políticas evalúan el impacto de reducciones anteriores, mientras la inflación se mantiene por encima del objetivo y el mercado laboral no muestra signos de deterioro severo.
El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que rastrea al Dólar frente a una cesta de seis monedas principales, se negocia alrededor de 99.27, extendiendo ganancias tras la modesta recuperación del lunes.
Por el lado japonés, el Yen continúa luchando por tracción incluso a medida que crecen las expectativas de que el Banco de Japón (BoJ) aumentará las tasas en su reunión del 19 de diciembre, elevando potencialmente la tasa de política a alrededor del 0.75%.
El gobernador del BoJ, Kazuo Ueda, dijo más temprano el martes que el reciente aumento en los rendimientos de los bonos del gobierno japonés a largo plazo ha sido "algo rápido", añadiendo que el banco central está listo para intervenir en el mercado de bonos si la volatilidad persiste. Ueda también señaló que la inflación subyacente parece estar convergiendo hacia el objetivo del BoJ.
Al mismo tiempo, las autoridades fiscales permanecen alertas ante movimientos bruscos de la moneda. La primera ministra Sanae Takaichi reiteró más temprano en el día que Tokio tomará "acciones apropiadas" si el Yen se debilita demasiado rápido.
La política monetaria de Estados Unidos está dirigida por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de los precios y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos objetivos es ajustar los tipos de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal, ésta sube los tipos de interés, incrementando los costes de los préstamos en toda la economía. Esto se traduce en un fortalecimiento del Dólar estadounidense (USD), ya que hace de Estados Unidos un lugar más atractivo para que los inversores internacionales coloquen su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Reserva Federal puede bajar los tipos de interés para fomentar el endeudamiento, lo que pesa sobre el billete verde.
La Reserva Federal (Fed) celebra ocho reuniones al año, en las que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) evalúa la situación económica y toma decisiones de política monetaria. El FOMC está formado por doce funcionarios de la Reserva Federal: los siete miembros del Consejo de Gobernadores, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y cuatro de los once presidentes de los bancos regionales de la Reserva, que ejercen sus cargos durante un año de forma rotatoria.
En situaciones extremas, la Reserva Federal puede recurrir a una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Es una medida de política no estándar utilizada durante las crisis o cuando la inflación es extremadamente baja. Fue el arma elegida por la Fed durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos de alta calidad de instituciones financieras. El QE suele debilitar al Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso a la QE, por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a instituciones financieras y no reinvierte el capital de los bonos que tiene en cartera que vencen, para comprar nuevos bonos. Suele ser positivo para el valor del Dólar estadounidense.