El par USD/JPY pierde terreno alrededor de 149.50 durante la sesión asiática temprana del lunes. El Dólar estadounidense (USD) se debilita frente al Yen japonés (JPY) ya que el Índice de Precios del Gasto en Consumo Personal (PCE) de EE.UU. indicó que la Reserva Federal (Fed) mantiene al banco central en camino hacia reducciones de tasas de interés en el futuro. Los operadores esperan las declaraciones de la Fed más tarde el lunes para obtener un nuevo impulso.
Los datos publicados por la Oficina de Análisis Económico de EE.UU. el viernes mostraron que el PCE de EE.UU. aumentó un 2.7% interanual en agosto frente al 2.6% en julio. Esta cifra estuvo en línea con la expectativa del mercado. El Índice de Precios del PCE subyacente, que excluye los precios volátiles de alimentos y energía, subió un 2.9% interanual en agosto, igualando el aumento de julio y la estimación de los analistas. En términos mensuales, el PCE y el PCE subyacente aumentaron un 0.3% y un 0.2%, respectivamente.
Aunque el banco central de EE.UU. tiene como objetivo una inflación del 2%, los informes son poco probables que cambien el rumbo para los responsables de la política que la semana pasada indicaron que ven dos recortes de tasas de 25 puntos básicos (bps) más antes de fin de año. Los mercados apuestan fuertemente por una reducción de tasas en octubre, aunque hay un poco menos de entusiasmo por otro movimiento en diciembre. El presidente de la Fed, Jerome Powell, indicó que mucho dependerá de los próximos datos económicos.
Por otro lado, la incertidumbre política en Japón podría pesar sobre el JPY y crear un viento de cola para el par. La elección del liderazgo del Partido Liberal Democrático (LDP) de Japón se llevará a cabo el 4 de octubre y el resultado podría retrasar la próxima subida de tasas de interés por parte del Banco de Japón (BoJ) si se selecciona a un candidato con opiniones moderadas.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.