El cruce AUD/JPY extiende la caída hasta cerca de 97.80 durante las horas de negociación asiáticas del miércoles. La creciente expectativa de que el Banco de Japón (BoJ) se mantendrá en su camino de normalización de políticas a pesar de la incertidumbre política interna apoya al Yen japonés (JPY) frente al Dólar australiano (AUD). Además, el tono cauteloso en los mercados financieros contribuye al avance del JPY.
Técnicamente, la visión positiva del AUD/JPY sigue en juego ya que el cruce está bien respaldado por encima de la media móvil exponencial (EMA) de 100 días en el gráfico diario. El camino de menor resistencia es al alza, con el Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días por encima de la línea media cerca de 62.65. Esto sugiere un impulso alcista a corto plazo.
En el lado positivo, la barrera clave al alza para el cruce aparece en 98.65, el límite superior de la Banda de Bollinger. Más al norte, el siguiente obstáculo se observa en 99.17, el máximo del 7 de enero. Una ruptura decisiva por encima de este nivel podría ganar más impulso y apuntar al nivel psicológico de 100.00.
Por otro lado, el mínimo del 10 de septiembre en 97.01 actúa como un nivel de soporte inicial para el AUD/JPY. Cualquier venta adicional por debajo de este nivel podría exponer 96.31, el mínimo del 5 de septiembre. El filtro adicional a la baja a tener en cuenta es 95.70, la EMA de 100 días.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.