La acción del precio del Oro está reaccionando a otro informe crítico de inflación de EE.UU. el miércoles, ya que la acción del precio sigue siendo sensible a los cambios en las expectativas de tasas de interés y los movimientos en el Dólar estadounidense.
En el momento de escribir, el XAU/USD está fluctuando entre niveles psicológicos clave de 3.300$ y 3.400$, mientras los operadores digieren la publicación del Índice de Precios de Producción (IPP) de EE.UU. para junio.
El IPP de junio resultó más suave de lo esperado, con la cifra general mensual sin cambios, por debajo de las previsiones de un aumento del 0.2%. En términos anuales, el IPP general subió un 2.3%, también por debajo de las expectativas del 2.5% y marcando una caída desde el 2.6% de mayo.
El IPP subyacente, que excluye alimentos y energía, siguió una tendencia similar, quedando en 0.0% intermensual y 2.6% interanual, por debajo de las lecturas pronosticadas y anteriores.
Los números más débiles de lo esperado sugieren una relajación de las presiones de precios a nivel de productores, lo que podría revivir las esperanzas del mercado por un cambio más dovish en la política de la Reserva Federal (Fed) y ofrecer soporte a corto plazo para los precios del Oro.
El Oro se está consolidando actualmente en un rango estrecho, con la acción del precio oscilando entre la media móvil simple (SMA) de 20 días en 3.333$ y el soporte de la SMA de 50 días en 3.323$, convergiendo cerca del nivel psicológico de 3.330$.
Esta alineación señala una volatilidad reducida y una falta de tendencia clara, ya que los operadores permanecen cautelosos ante posibles catalizadores.
XAU/USD se mantiene actualmente justo por encima del retroceso de Fibonacci del 38.2% del movimiento de bajo a alto de abril en 3.292$, que está actuando como soporte inmediato. En el lado positivo, se está formando resistencia en el nivel de Fibo del 23.6% cerca de 3.371$, con el umbral psicológico de 3.400$ como el próximo techo importante.
Un patrón de triángulo simétrico se rompió recientemente, pero la acción del precio sigue comprimida, lo que sugiere que el mercado aún está esperando dirección de los datos entrantes o de la orientación de la Fed. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) en 50 refleja un momentum neutral, reforzando la falta de sesgo en el comercio.
El Oro ha desempeñado un papel fundamental en la historia de la humanidad, ya que se ha utilizado ampliamente como depósito de valor y medio de intercambio. En la actualidad, aparte de su brillo y su uso para joyería, el metal precioso se considera un activo refugio, lo que significa que se considera una buena inversión en tiempos turbulentos. El Oro también se considera una cobertura contra la inflación y la depreciación de las divisas, ya que no depende de ningún emisor o gobierno concreto.
Los bancos centrales son los mayores tenedores de Oro. En su objetivo de respaldar sus divisas en tiempos turbulentos, los bancos centrales tienden a diversificar sus reservas y a comprar Oro para mejorar la percepción de fortaleza de la economía y de la divisa. Unas reservas de Oro elevadas pueden ser una fuente de confianza para la solvencia de un país. Los bancos centrales añadieron 1.136 toneladas de Oro por valor de unos 70.000 millones de dólares a sus reservas en 2022, según datos del Consejo Mundial del Oro. Se trata de la mayor compra anual desde que existen registros. Los bancos centrales de economías emergentes como China, India y Turquía están aumentando rápidamente sus reservas de Oro.
El Oro tiene una correlación inversa con el Dólar estadounidense y los bonos del Tesoro de EE.UU., que son los principales activos de reserva y refugio. Cuando el Dólar se deprecia, el precio del Oro tiende a subir, lo que permite a los inversores y a los bancos centrales diversificar sus activos en tiempos turbulentos. El Oro también está inversamente correlacionado con los activos de riesgo. Un repunte en el mercado bursátil tiende a debilitar el precio del Oro, mientras que las ventas masivas en los mercados de mayor riesgo tienden a favorecer al metal precioso.
El precio del Oro puede moverse debido a una amplia gama de factores. La inestabilidad geopolítica o el temor a una recesión profunda pueden hacer que el precio del Oro suba rápidamente debido a su condición de activo refugio. Como activo sin rendimiento, el precio del Oro tiende a subir cuando bajan los tipos de interés, mientras que el encarecimiento del dinero suele lastrar al metal amarillo. Aun así, la mayoría de los movimientos dependen de cómo se comporte el Dólar estadounidense (USD), ya que el activo se cotiza en dólares (XAU/USD). Un Dólar fuerte tiende a mantener controlado el precio del Oro, mientras que un Dólar más débil probablemente empuje al alza los precios del Oro.