El cruce EUR/JPY se negocia en territorio positivo cerca de 172.45 durante las horas de negociación asiáticas del martes. La creciente expectativa de que el Banco de Japón (BoJ) mantendría las tasas de interés bajas por más tiempo del que desea podría pesar sobre el Yen japonés (JPY) frente al Euro (EUR). La publicación de la Encuesta ZEW de Alemania se dará a conocer más tarde el martes.
Técnicamente, el EUR/JPY mantiene la vibra alcista en el gráfico diario, con el precio manteniéndose por encima de la Media Móvil Exponencial (EMA) clave de 100 días. Sin embargo, el Índice de Fuerza Relativa (RSI) de 14 días se sitúa por encima de la línea media cerca de 73.10, indicando la condición de sobrecompra del RSI. Esto sugiere que no se puede descartar una mayor consolidación o una venta temporal antes de posicionarse para cualquier apreciación del EUR/JPY a corto plazo.
La primera barrera alcista para el cruce surge en 173.20, representando el límite superior de la Banda de Bollinger. Ganancias extendidas podrían ver un repunte hasta 174.52, el máximo del 3 de julio de 2024. El filtro adicional al alza a vigilar es 175.43, el máximo del 11 de julio de 2024.
Por otro lado, el nivel de soporte inicial para el cruce se ubica en 170.81, el mínimo del 11 de julio. Una ruptura de este nivel podría exponer el nivel psicológico de 170.00. El próximo nivel de contención a vigilar es 169.04, el mínimo del 2 de julio.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.