El Yen japonés (JPY) se mantiene en una posición favorable frente a un Dólar estadounidense (USD) ampliamente más débil por segundo día consecutivo el martes y parece estar preparado para apreciarse aún más. El lenguaje más contundente de la Ministra de Finanzas de Japón, Satsuki Katayama, resulta ser un factor clave que proporciona un buen impulso al JPY en medio de la escasa liquidez de fin de año. Además, el aumento de las tensiones geopolíticas contribuye a impulsar flujos hacia el JPY como refugio seguro.
Los factores mencionados anteriormente, en gran medida, compensan las preocupaciones sobre el deterioro de las condiciones fiscales de Japón y un tono de riesgo positivo, lo que hace poco para afectar la demanda del JPY como refugio seguro. El USD, por otro lado, cae a un mínimo de una semana tras los comentarios del Secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, el lunes. Esto contribuye a la caída del par USD/JPY por debajo de los 156.00 durante la sesión asiática y respalda la posibilidad de un movimiento de depreciación adicional.
El fracaso de esta semana cerca de la zona de 158.00 constituye la formación de un patrón de doble techo bajista. Además, una ruptura intradía por debajo del nivel de retroceso de Fibonacci del 38.2% del movimiento al alza de la semana pasada favorece a los bajistas del USD/JPY y respalda la posibilidad de más pérdidas. Las medias móviles a corto plazo se han aplanado tras el reciente revés, moderando el impulso al alza.
La línea de Convergencia/Divergencia de Medias Móviles (MACD) cae por debajo de la línea de señal, con ambas rondando la marca cero, y el histograma se vuelve negativo, sugiriendo un desvanecimiento del impulso alcista. El RSI se sitúa en 47.40 (neutral) tras retroceder de sobrecompra. Medido desde el mínimo de 154.39 hasta el máximo de 157.71, el retroceso del 50% en 156.05 ofrece soporte cercano. Mantenerse por encima de este último podría contener el retroceso.
Las medias móviles tendrían que reafirmar una pendiente positiva para restaurar el impulso alcista, de lo contrario, el par corre el riesgo de una mayor consolidación. Si la debilidad se extiende, el histograma negativo del MACD probablemente se ampliará, y el RSI podría caer hacia 40, reforzando un tono más suave. Medido desde el mínimo de 154.39 hasta el máximo de 157.71, una ruptura por debajo del retroceso del 50% en 156.05 expondría el retroceso del 61.8% en 155.66. Por el contrario, una recuperación a través de 156.44 podría abrir espacio hacia el retroceso del 23.6% en 156.93.
(El análisis técnico de esta historia fue escrito con la ayuda de una herramienta de IA)
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.