El par EUR/USD intenta estabilizarse alrededor de 1.1600 durante la sesión asiática del miércoles, tras una racha de tres días de pérdidas. El par de divisas principal lucha por ganar terreno mientras el Dólar estadounidense (USD) mantiene su reciente movimiento al alza, que se produjo tras la disminución de las tensiones comerciales entre Estados Unidos (EE.UU.) y China.
En el momento de la redacción, el Índice del Dólar estadounidense (DXY), que rastrea el valor del Dólar frente a seis monedas principales, se mantiene con ganancias recientes cerca de 99.00.
Las tensiones comerciales entre EE.UU. y China parecen estar disminuyendo tras los comentarios del presidente Donald Trump de que tanto Washington como Pekín llegarán a un consenso después de su reunión con el líder chino Xi Jinping en Corea del Sur a finales de este mes.
Otra razón detrás de la firmeza del Dólar estadounidense son las crecientes expectativas de que el gobierno federal podría reabrir tras casi tres semanas de cierre. El lunes, el asesor económico de la Casa Blanca, Kevin Hassett, declaró que cree que el cierre probablemente terminará en algún momento de esta semana.
Mientras tanto, el Euro (EUR) opera con cautela antes de los discursos de la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, y del vicepresidente Luis De Guindos, que están programados para la primera sesión norteamericana.
El próximo gran desencadenante para el Euro sería el anuncio de política monetaria del BCE programado para la próxima semana.
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias. Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.