El USD/BRL se mantiene más fuerte después de registrar aproximadamente un 2.5% de ganancias en la sesión anterior, cotizando alrededor de 5.60 durante las horas europeas del jueves. El par se apreció a medida que el Real brasileño cayó drásticamente después de que el presidente estadounidense Donald Trump anunciara un arancel del 50% sobre las importaciones brasileñas, efectivo a partir del 1 de agosto, en comparación con la tasa anterior del 10% impuesta en abril.
El presidente Trump justificó su movimiento acusando a Brasil de participar en prácticas comerciales desleales y, notablemente, como represalia por el juicio en curso del ex presidente brasileño Jair Bolsonaro, quien enfrenta graves cargos relacionados con los esfuerzos para anular los resultados de las elecciones de 2022. En respuesta, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva prometió retaliar invocando su Ley de Reciprocidad Económica.
Además, Brasil enfrenta precios en declive para exportaciones importantes como el petróleo crudo y el mineral de hierro, lo que lleva a una reducción de los flujos de divisas. Mientras tanto, una sorpresiva ampliación del déficit comercial de junio y una caída inesperada en la producción industrial han empañado aún más las perspectivas de una recuperación económica a corto plazo.
El potencial alcista del USD/BRL podría estar restringido ya que el Dólar estadounidense (USD) enfrenta desafíos debido a las crecientes preocupaciones comerciales y la incertidumbre en torno a la perspectiva de política de la Reserva Federal (Fed). Las últimas Minutas del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la reunión del 17-18 de junio, publicadas el miércoles, indicaron una amplia incertidumbre y una división entre los responsables de la política de la Fed sobre cómo los aranceles impactarán la inflación en el futuro.
Aunque los aranceles y los impuestos generan ingresos gubernamentales para financiar bienes y servicios públicos, tienen varias distinciones. Los aranceles se pagan por adelantado en el puerto de entrada, mientras que los impuestos se pagan en el momento de la compra. Los impuestos se imponen a los contribuyentes individuales y a las empresas, mientras que los aranceles son pagados por los importadores.
Existen dos escuelas de pensamiento entre los economistas respecto al uso de aranceles. Mientras que algunos argumentan que los aranceles son necesarios para proteger las industrias nacionales y abordar los desequilibrios comerciales, otros los ven como una herramienta perjudicial que podría potencialmente aumentar los precios a largo plazo y llevar a una guerra comercial dañina al fomentar aranceles recíprocos.
Durante la campaña electoral para las elecciones presidenciales de noviembre de 2024, Donald Trump dejó claro que tiene la intención de utilizar aranceles para apoyar la economía de EE.UU. y a los productores estadounidenses. En 2024, México, China y Canadá representaron el 42% del total de las importaciones de EE.UU. En este período, México se destacó como el principal exportador con 466.600 millones de dólares, según la Oficina del Censo de EE.UU. Por lo tanto, Trump quiere centrarse en estas tres naciones al imponer aranceles. También planea utilizar los ingresos generados a través de los aranceles para reducir los impuestos sobre la renta personal.