El cruce EUR/GBP se mantiene en terreno positivo cerca de 0.8545 durante la sesión europea temprana del viernes. La Libra esterlina (GBP) se debilita frente al Euro (EUR) tras los datos económicos del Reino Unido más débiles de lo esperado. Más tarde el viernes, se publicará el Boletín Económico y la lectura preliminar de la Confianza del Consumidor de la Eurozona.
Los datos publicados por la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS) mostraron el viernes que las ventas minoristas del Reino Unido cayeron un 2.7% intermensual en mayo frente a un aumento del 1.3% anterior (revisado desde 1.2%). Esta cifra estuvo por debajo del consenso del mercado de una caída del 0.5%. En términos anuales, las ventas minoristas cayeron un 1.3% en mayo en comparación con un aumento del 5.0% anterior, peor que la estimación de un incremento del 1.7%. La GBP atrae a algunos vendedores en una reacción inmediata a los datos negativos de ventas minoristas del Reino Unido.
El Banco de Inglaterra (BoE) decidió mantener las tasas en 4.25% en su reunión de política de junio el jueves, como se esperaba ampliamente. El gobernador del BoE, Andrew Bailey, dijo que las tasas de interés permanecen en un camino gradual a la baja, pero advirtió que "el mundo es altamente impredecible."
El banco central enfatizó las preocupaciones sobre el conflicto entre Israel e Irán, que podría hacer que los precios generales aumenten y afectar las decisiones futuras sobre tasas. Economistas encuestados por Reuters anticipan que los responsables de políticas del BoE recortarán las tasas en 25 puntos básicos (pbs) en la próxima reunión en agosto, y reducirán otros 25 pbs en el cuarto trimestre.
En el frente del Euro, el tono de línea dura en torno a la perspectiva de política del Banco Central Europeo (BCE) ha elevado la moneda compartida. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, señaló que las reducciones de tasas están llegando a su fin, ya que el banco central está ahora "en una buena posición" para enfrentar las incertidumbres prevalecientes. Mientras tanto, el miembro del Consejo de Gobierno del BCE, Francois Villeroy de Galhau, dijo a principios de esta semana que el banco central necesita evaluar las fluctuaciones en los precios del petróleo y el euro a medida que establece los costos de endeudamiento.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo