El Oro (XAU/USD) se dispara más allá de la cifra redonda de 3.900$ durante la sesión asiática del lunes, alcanzando un nuevo récord histórico en medio de la creciente aceptación de recortes adicionales de tasas de interés por parte de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed). Además, el cierre del gobierno de EE.UU. también mantiene la demanda de lingotes de refugio seguro en juego debido al aumento de las tensiones comerciales y geopolíticas. Mientras tanto, una paloma fiscal, Sanae Takaichi, fue elegida como líder del Partido Liberal Democrático (LDP) de Japón y se convirtió en la próxima Primera Ministra. Esto aumenta la posibilidad de que el Banco de Japón (BoJ) retrase un aumento adicional de las tasas de interés y se convierte en otro factor que impulsa los flujos hacia el metal amarillo no productivo.
Aparte de esto, el fuerte movimiento al alza podría atribuirse además a algunas ventas técnicas tras una sostenida fortaleza y aceptación más allá de la marca de 3.900$. Dicho esto, un repunte en la compra de Dólares estadounidenses (USD), respaldado por una caída en el Yen japonés (JPY), podría actuar como un viento en contra para el precio del Oro. Además, las condiciones extremadamente sobrecompradas en gráficos a corto plazo hacen prudente esperar una consolidación a corto plazo o un retroceso modesto antes de posicionarse para una extensión de la tendencia alcista bien establecida que se ha observado durante las últimas siete semanas. No obstante, el trasfondo fundamental sugiere que el camino de menor resistencia para el par XAU/USD es al alza.
Desde una perspectiva técnica, el fuerte movimiento del lunes más allá de la marca de 3.900$ podría verse como un nuevo desencadenante para los alcistas del XAU/USD y valida la perspectiva positiva a corto plazo. Sin embargo, el Índice de Fuerza Relativa (RSI) diario se mantiene bien por encima de la marca de 70 y muestra condiciones de sobrecompra, lo que justifica cierta cautela antes de posicionarse para más ganancias.
Por el contrario, cualquier retroceso correctivo podría verse ahora como una oportunidad de compra y permanecer limitado cerca de la región de 3.900$-3.895$. Una ruptura convincente por debajo podría provocar algunas ventas técnicas y arrastrar el precio del Oro hacia el soporte relevante cercano a la zona de 3.865$-3.863$, o la media móvil simple (SMA) de 100 horas. Esta última se acerca a una línea de tendencia ascendente que se extiende desde niveles por debajo de 3.800$ alcanzados el martes pasado y debería actuar como un punto clave.
El Oro ha desempeñado un papel fundamental en la historia de la humanidad, ya que se ha utilizado ampliamente como depósito de valor y medio de intercambio. En la actualidad, aparte de su brillo y su uso para joyería, el metal precioso se considera un activo refugio, lo que significa que se considera una buena inversión en tiempos turbulentos. El Oro también se considera una cobertura contra la inflación y la depreciación de las divisas, ya que no depende de ningún emisor o gobierno concreto.
Los bancos centrales son los mayores tenedores de Oro. En su objetivo de respaldar sus divisas en tiempos turbulentos, los bancos centrales tienden a diversificar sus reservas y a comprar Oro para mejorar la percepción de fortaleza de la economía y de la divisa. Unas reservas de Oro elevadas pueden ser una fuente de confianza para la solvencia de un país. Los bancos centrales añadieron 1.136 toneladas de Oro por valor de unos 70.000 millones de dólares a sus reservas en 2022, según datos del Consejo Mundial del Oro. Se trata de la mayor compra anual desde que existen registros. Los bancos centrales de economías emergentes como China, India y Turquía están aumentando rápidamente sus reservas de Oro.
El Oro tiene una correlación inversa con el Dólar estadounidense y los bonos del Tesoro de EE.UU., que son los principales activos de reserva y refugio. Cuando el Dólar se deprecia, el precio del Oro tiende a subir, lo que permite a los inversores y a los bancos centrales diversificar sus activos en tiempos turbulentos. El Oro también está inversamente correlacionado con los activos de riesgo. Un repunte en el mercado bursátil tiende a debilitar el precio del Oro, mientras que las ventas masivas en los mercados de mayor riesgo tienden a favorecer al metal precioso.
El precio del Oro puede moverse debido a una amplia gama de factores. La inestabilidad geopolítica o el temor a una recesión profunda pueden hacer que el precio del Oro suba rápidamente debido a su condición de activo refugio. Como activo sin rendimiento, el precio del Oro tiende a subir cuando bajan los tipos de interés, mientras que el encarecimiento del dinero suele lastrar al metal amarillo. Aun así, la mayoría de los movimientos dependen de cómo se comporte el Dólar estadounidense (USD), ya que el activo se cotiza en dólares (XAU/USD). Un Dólar fuerte tiende a mantener controlado el precio del Oro, mientras que un Dólar más débil probablemente empuje al alza los precios del Oro.