El USD/CHF continúa su racha ganadora por tercera sesión consecutiva, cotizando alrededor de 0.8020 durante las horas asiáticas del miércoles. El par se aprecia a medida que el Dólar estadounidense (USD) se mantiene estable, los operadores adoptan cautela antes del próximo Índice de Precios de Producción (IPP) de EE.UU. más tarde el miércoles. El Libro Beige de la Fed y la Producción Industrial también serán observados.
Además, el Dólar estadounidense podría apreciarse aún más tras el informe de inflación de junio, que renovó las preocupaciones sobre la posibilidad de tasas de interés altas prolongadas por parte de la Reserva Federal (Fed). El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de EE.UU. subió un 2.7% interanual en junio, como se esperaba. El IPC subyacente se situó en 2.9%, justo por debajo de la previsión del 3.0% pero aún notablemente por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal.
El sentimiento del mercado se alivia un poco tras la indicación de Trump de estar dispuesto a participar más en discusiones comerciales, indicando la posibilidad de negociar con la Unión Europea (UE) y otros socios comerciales clave.
Sin embargo, Trump indicó el martes que se está preparando para enviar cartas de aranceles pronto a países más pequeños, incluidas naciones de África y el Caribe, según Reuters. Trump además declaró que su administración probablemente establecería un arancel de "un poco más del 10%" para esos países.
Los operadores esperan que el Banco Nacional Suizo (SNB) retrase un mayor alivio de la política monetaria tras el reciente informe de inflación suizo de junio. Se espera que los funcionarios del SNB mantengan la tasa de interés sin cambios en 0% en septiembre, con muchos analistas proyectando que probablemente se mantendrá en ese nivel hasta 2026.
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.