El Euro (EUR) se aplana frente al Franco suizo (CHF) el jueves, cediendo ganancias iniciales a medida que el cruce EUR/CHF baja durante las horas de negociación estadounidenses. Tras un fuerte inicio del día, el Euro no logró mantener el impulso, viéndose presionado por la fortaleza generalizada del Dólar estadounidense y datos laborales semanales de EE.UU. más fuertes de lo esperado, lo que reforzó el atractivo del Dólar y pesó sobre la moneda compartida.
En el momento de escribir, el EUR/CHF se cotiza alrededor de 0.9314, retrocediendo de un máximo intradía de 0.9328. A pesar del retroceso, el cruce sigue siendo marginalmente más alto, con un aumento del 0.06% en el día.
El Franco suizo continúa mostrando una fortaleza generalizada este año, con ganancias no solo frente al Euro, sino de manera más notable frente al Dólar estadounidense, donde se ha apreciado casi un 13% en lo que va del año. Este aumento refleja una combinación de demanda persistente de refugio seguro en medio de tensiones comerciales globales y presiones deflacionarias en el país.
La diferencia en la política monetaria entre el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco Nacional Suizo (SNB) también está desempeñando un papel importante. El BCE recortó tasas en junio y es probable que pause en julio mientras lidia con riesgos comerciales y geopolíticos. En contraste, el SNB ha sido más agresivo, reduciendo su tasa a cero e introduciendo silenciosamente una tasa negativa sobre las reservas bancarias adicionales. Los funcionarios del SNB también han declarado que están abiertos a más recortes si es necesario. Como resultado, el Franco sigue siendo demandado, apoyado tanto por su estatus de refugio seguro como por la política ultra-flexible del SNB, lo que ejerce presión sobre el par EUR/CHF.
Desde una perspectiva técnica, el EUR/CHF sigue bajo presión, cotizando cerca del borde inferior de su rango de consolidación de varias semanas entre 0.9300 y 0.9400. Tras múltiples intentos fallidos de romper al alza en junio, el par ha ido descendiendo en julio, con la media móvil exponencial (EMA) de 21 días actualmente en 0.9352 actuando como una resistencia dinámica inmediata. La reciente acción del precio sugiere que se está acumulando un impulso bajista, con los vendedores observando una posible ruptura por debajo del soporte clave en 0.9300.
Los indicadores de impulso refuerzan el sesgo bajista. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) está en tendencia a la baja y actualmente se sitúa en 42.10, por debajo de la marca neutral de 50, indicando un debilitamiento del impulso alcista. Mientras tanto, el Índice Direccional Promedio (ADX) ha subido a 21.18, insinuando una tendencia en desarrollo tras un prolongado período de movimiento lateral. Un cierre sostenido por debajo de 0.9300 confirmaría una ruptura a la baja y expondría al par a mayores pérdidas, posiblemente hacia el área de 0.9250. Por el lado positivo, se necesita una recuperación por encima de 0.9350 para cambiar la perspectiva a corto plazo de nuevo a neutral.