El EUR/USD finalizó la sesión del miércoles con ganancias decentes de más del 0.17% después de que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) publicara las actas de su reunión de política monetaria de junio, que mostraron que algunos funcionarios están considerando al menos un recorte de tasas de interés. A medida que comienza la sesión asiática, el par cotiza a 1.1715, prácticamente sin cambios, en el momento de escribir.
Las actas de la reunión de la Reserva Federal revelaron que la mayoría de los responsables de la política ven un recorte de tasas más adelante este año como una opción adecuada. Al mismo tiempo, algunos funcionarios indicaron que una reducción tan pronto como en julio podría ser justificada, siempre que los datos entrantes se alineen con sus estimaciones.
Aparte de esto, Washington reanudó el envío de cartas arancelarias a Filipinas, Moldavia, Argelia, Irak, Libia, Brunéi, Sri Lanka y Brasil, con aranceles establecidos en un rango del 20% al 50%.
El Euro cayó a pesar de las noticias que revelaron que la Casa Blanca no apuntó a la Unión Europea (UE) con aranceles adicionales y que podría asegurar algunas excepciones de la tasa base del 10%.
La fortaleza del Dólar presiona al EUR/USD. El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que rastrea el valor del dólar frente a una cesta de seis divisas, finalizó la sesión del miércoles plano en 97.51.
El principal motor del miércoles sigue siendo las noticias comerciales. Washington desveló aranceles a Filipinas (20%), Moldavia (25%), Argelia (30%), Irak (30%), Libia (30%), Brunéi (25%), Sri Lanka (30%) y, por último, Brasil (50%).
Junto a esto, los participantes del mercado asimilaron las últimas Minutas del FOMC, que mostraron que algunos funcionarios de la Fed no ven un recorte de tasas en 2025. Citando que las presiones inflacionarias siguen siendo altas, junto con las expectativas de inflación en aumento y la resiliencia económica en curso. Todos los participantes consideraron que la tasa de política actual es apropiada. Los participantes coincidieron en que los riesgos de estanflación han disminuido, aunque siguen siendo elevados.
Washington desveló aranceles a Filipinas (20%), Moldavia (25%), Argelia (30%), Irak (30%), Libia (30%), Brunéi (25%), Sri Lanka (30%) y, por último, Brasil (50%).
Trump añadió que podría haber sido más duro en el comercio y anunció que impondría aranceles a productos farmacéuticos, semiconductores y cobre, lo que, según dijo, resultaría en aranceles de alrededor del 50%.
La UE declaró que ha habido algunos avances en un acuerdo comercial marco con los Estados Unidos (EE.UU.), según el portavoz de la UE, Olof Gill. Indicó que Ursula Von der Leyen mantuvo una llamada con Trump el domingo, diciendo que "tuvieron un buen intercambio".
El EUR/USD cotiza lateralmente dentro del rango de 1.1700-1.1720, con los operadores aún incapaces de romper el soporte clave en 1.1700. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) muestra que los compradores siguen a cargo pero están perdiendo algo de impulso a corto plazo.
Para una continuación alcista, el EUR/USD debe romper 1.1720 antes de probar el máximo del 7 de julio de 1.1789. La resistencia superior se encuentra en 1.1800 y el máximo del año hasta la fecha (YTD) de 1.1829.
Por el contrario, si el EUR/USD cae por debajo de 1.1700, esto expondrá la media móvil simple (SMA) de 20 días como el primer nivel de soporte en 1.1649. Una ruptura de este último expondrá la cifra de 1.1600, seguida por la SMA de 50 días en 1.1448.
El Euro es la moneda de los 19 países de la Unión Europea que pertenecen a la eurozona. Es la segunda moneda más negociada del mundo, detrás del dólar estadounidense. En 2022, representó el 31 % de todas las transacciones de divisas, con un volumen de negocios diario promedio de más de 2,2 billones de dólares al día. El EUR/USD es el par de divisas más negociado del mundo, con un estimado del 30 % de todas las transacciones, seguido del EUR/JPY (4 %), el EUR/GBP (3 %) y el EUR/AUD (2 %).
El Banco Central Europeo (BCE), con sede en Frankfurt (Alemania), es el banco de reserva de la eurozona. El BCE establece los tipos de interés y gestiona la política monetaria. El mandato principal del BCE es mantener la estabilidad de precios, lo que significa controlar la inflación o estimular el crecimiento. Su principal herramienta es la subida o la bajada de los tipos de interés. Los tipos de interés relativamente altos (o la expectativa de tipos más altos) suelen beneficiar al euro y viceversa. El Consejo de Gobierno del BCE toma decisiones sobre política monetaria en reuniones que se celebran ocho veces al año. Las decisiones las toman los directores de los bancos nacionales de la Eurozona y seis miembros permanentes, entre ellos la presidenta del BCE, Christine Lagarde.
Los datos de inflación de la eurozona, medidos por el Índice Armonizado de Precios al Consumidor (IPCA), son un importante indicador econométrico para el euro. Si la inflación aumenta más de lo esperado, especialmente si supera el objetivo del 2% del BCE, obliga al BCE a subir los tipos de interés para volver a controlarla. Los tipos de interés relativamente altos en comparación con sus homólogos suelen beneficiar al euro, ya que hacen que la región sea más atractiva como lugar para que los inversores globales depositen su dinero.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden tener un impacto en el euro. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios, el empleo y las encuestas de confianza del consumidor pueden influir en la dirección de la moneda única. Una economía fuerte es buena para el Euro. No sólo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al BCE a subir los tipos de interés, lo que fortalecerá directamente al euro. De lo contrario, si los datos económicos son débiles, es probable que el Euro caiga. Los datos económicos de las cuatro mayores economías de la zona del euro (Alemania, Francia, Italia y España) son especialmente significativos, ya que representan el 75% de la economía de la zona del euro.
Otro dato importante que se publica sobre el Euro es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda ganará valor simplemente por la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo