El par USD/CHF gana fuerza hasta alrededor de 0.8125 durante la sesión europea temprana del lunes, impulsado por el rebote en el Dólar estadounidense (USD). Los inversores esperan los precios de producción e importación de mayo de Suiza y las proyecciones económicas de SECO, que se publicarán más tarde el lunes.
Los datos económicos de EE.UU. del viernes, más fuertes de lo esperado, elevan al Dólar estadounidense frente al Franco suizo (CHF). El Índice de Sentimiento del Consumidor de la Universidad de Michigan mejoró a 60.5 en junio, en comparación con 52.2 en la lectura anterior. Esta lectura fue más fuerte que el 53.5 esperado.
Mientras tanto, el Índice del Dólar estadounidense (DXY), un índice del valor del Dólar estadounidense (USD) medido contra una cesta de seis monedas mundiales, se recupera a cerca de 98.25, sumando un 0.15% en el día.
La reunión de política de la Reserva Federal de EE.UU. (Fed) ocupará un lugar central más tarde el miércoles. Se anticipa que el banco central de EE.UU. mantenga las tasas de interés estables en su reunión de junio. Los mercados de futuros esperan dos recortes de tasas para fin de año, posiblemente comenzando en septiembre, respaldados por datos de inflación más suaves la semana pasada.
Los inversores temen que el conflicto entre Israel e Irán pueda escalar a un conflicto regional más amplio. Esto, a su vez, podría impulsar la moneda refugio como el CHF y crear un viento en contra para el par. Israel comenzó ataques contra Irán el viernes, apuntando a instalaciones nucleares y fábricas de misiles y matando a líderes militares. A última hora del domingo, Irán lanzó un nuevo ataque contra Israel, con una explosión vista en la ciudad costera de Haifa.
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.