El Peso Mexicano (MXN) se está negociando más fuerte frente al Dólar estadounidense (USD) el lunes, mientras los operadores digieren el impacto de una sorpresiva escalada arancelaria por parte de Estados Unidos. El par USD/MXN está luchando por mantener cualquier impulso de recuperación, con el sentimiento de riesgo afectado y el Dólar ampliamente ofrecido.
El presidente estadounidense Donald Trump duplicó el cargo arancelario de importación sobre el acero y el aluminio el viernes, pasando de la tasa actual del 25% al 50%. Este movimiento de política, destinado a fortalecer la industria del acero estadounidense, reintroduce tensiones comerciales en la narrativa del mercado justo cuando los inversores habían comenzado a centrarse en la mejora de los datos económicos y la estabilización de la inflación.
Aunque México sigue siendo un socio comercial clave y exportador de metales a Estados Unidos, el Peso se ha mantenido firme en la respuesta inicial. Parte de la resiliencia puede deberse a un retroceso más amplio en el Dólar estadounidense, ya que los mercados reevalúan las implicaciones de los cambios en la política proteccionista para el crecimiento y la inflación.
La respuesta de México al aumento de los aranceles ha sido medida hasta ahora. La presidenta Claudia Sheinbaum dijo el lunes que México sigue exento de los nuevos aranceles anunciados, atribuyendo esto a la cooperación diplomática continua. "Nuestros fuertes lazos bilaterales y el diálogo abierto han ayudado a proteger a México de sanciones comerciales más amplias", declaró durante una conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional de la Ciudad de México.
Sin embargo, el ministro de Economía, Marcelo Ebrard, fue más directo en su crítica, calificando los aumentos arancelarios como "injustificados". En una declaración publicada durante el fin de semana, Ebrard agregó: "Ese arancel no está justificado. Es injusto según los propios argumentos del presidente Trump. Estados Unidos tiene un superávit comercial con México en acero y aluminio. Esta política penaliza a uno de los socios comerciales más confiables de América".
Si bien no se han anunciado medidas de represalia, Ebrard confirmó que México está en conversaciones continuas con funcionarios estadounidenses para asegurar que los términos comerciales se mantengan "equilibrados y predecibles".
El USD/MXN está en tendencia a la baja. El par no ha logrado romper la zona de resistencia de 19.47-19.63, limitada por la Media Móvil Simple (SMA) de 20 días y el retroceso de Fibonacci del 23.6% de la caída de abril-mayo. El último intento de rally se detuvo por debajo de la línea de tendencia descendente, reforzando el sesgo a la baja.
El soporte se está formando alrededor de 19.18, con el canal bajista más amplio aún intacto. Una ruptura decisiva por debajo de este nivel podría abrir el camino para probar el área de 19.11, vista por última vez a principios de 2023.
Gráfico diario del USD/MXN
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) apunta hacia abajo cerca de 40, sugiriendo un aumento del impulso bajista y espacio para más caídas.
La fortaleza a corto plazo del Peso puede persistir si los mercados globales continúan valorando el impacto negativo de las fricciones comerciales en el crecimiento de EE.UU. Sin embargo, los riesgos también permanecen inclinados hacia el otro lado, especialmente si México se convierte en un objetivo directo de más acciones comerciales.
Un movimiento sostenido por debajo de 19.18 validaría la configuración técnica bajista y podría abrir la puerta hacia nuevos mínimos. Por otro lado, se requiere una ruptura por encima de 19.63 para cambiar la perspectiva a corto plazo y volver a centrar la atención en 20.20.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.