El par GBP/USD se apoya en el fuerte movimiento al alza del día anterior y gana tracción positiva por segundo día consecutivo el martes. El impulso eleva los precios al contado al nivel más alto desde principios de octubre, más cerca de la marca psicológica de 1.3500, y está patrocinado por un Dólar estadounidense (USD) en general más débil. Además, la configuración técnica respalda la posibilidad de un movimiento de apreciación adicional para el par de divisas.
La reciente ruptura a través de la media móvil simple (SMA) de 100 días y una posterior fortaleza más allá del nivel de retroceso de Fibonacci del 61.8% de la caída de septiembre a noviembre, alrededor de la cifra redonda de 1.3500, se verá como un nuevo desencadenante para los alcistas. Además, los osciladores positivos en el gráfico diario validan la perspectiva constructiva a corto plazo y sugieren que el camino de menor resistencia para el par GBP/USD es al alza en medio de la inclinación de línea dura del Banco de Inglaterra (BoE).
La SMA de 100 días se ha aplanado en las sesiones recientes y está comenzando a elevarse, con el precio manteniéndose por encima de ella y preservando un tono firme. La línea de Convergencia/Divergencia de Medias Móviles (MACD) se mantiene en territorio positivo pero ha disminuido desde los máximos anteriores, lo que sugiere un impulso al alza moderado. Una ruptura sostenida y aceptación por encima de la marca de 1.3500 podría allanar el camino para un movimiento más allá de la marca de 1.3600, hacia el nivel de retroceso del 78.6% de Fibonacci, alrededor del área de 1.3615.
Si el par retrocede, la SMA de 100 días, actualmente situada alrededor de la región de 1.3370, ofrecería un soporte dinámico inicial al par GBP/USD. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) en 68 se sitúa cerca de sobrecompra, señalando un impulso robusto pero estirado que podría limitar las ganancias sin nuevos catalizadores. Un movimiento claro por encima del retroceso del 61.8% mantendría a los compradores en control, mientras que la incapacidad para mantener la ruptura podría ver una consolidación de regreso hacia la media móvil.
(El análisis técnico de esta historia fue escrito con la ayuda de una herramienta de IA)
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d. C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de cambio de divisas (FX) más comercializada en el mundo, representando el 12% de todas las transacciones, con un promedio de 630 mil millones de $ al día, según datos de 2022. Sus pares comerciales clave son GBP/USD, que representa el 11% de FX, GBP/JPY (3%) y EUR/GBP (2%). La Libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria decidida por el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en si ha logrado su objetivo principal de "estabilidad de precios": una tasa de inflación constante de alrededor del 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intentará controlarla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para las personas y las empresas. Esto es generalmente positivo para la libra esterlina, ya que los tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores globales inviertan su dinero. Cuando la inflación cae demasiado es una señal de que el crecimiento económico se está desacelerando. En este escenario, el Banco de Inglaterra considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas se endeudarán más para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados miden la salud de la economía y pueden afectar el valor de la libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI de manufactura y servicios y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Otro dato importante que se publica y afecta a la Libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un período determinado. Si un país produce productos de exportación muy demandados, su moneda se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que buscan comprar esos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa en el caso de un saldo negativo