El crecimiento del PIB se mantuvo sólido en un 5.2% interanual en el segundo trimestre, mientras que los datos mensuales indican signos de suavización. El crecimiento de la inversión se desaceleró drásticamente en junio, en parte debido a un descenso más profundo en la inversión en vivienda. La presión deflacionaria se intensificó, reflejando en parte la sobrecapacidad en algunos sectores. Se prevén más esfuerzos para estabilizar el sector de la vivienda y promover el consumo de servicios en la segunda mitad del año, informan los economistas de Standard Chartered.
"El crecimiento económico de China se mantuvo resistente en el segundo trimestre gracias a la producción y la actividad comercial anticipadas, así como al estímulo fiscal. El PIB ajustado estacionalmente se expandió un 1.1% trimestral en el segundo trimestre, apenas 0.1 puntos porcentuales más lento que en el primer trimestre. El crecimiento del PIB real se moderó 0.2 puntos porcentuales desde el primer trimestre hasta el 5.2% interanual, manteniéndose por encima del 5% durante el tercer trimestre consecutivo. El consumo siguió siendo el motor clave y las exportaciones netas continuaron apoyando el crecimiento económico. La brecha negativa entre el crecimiento nominal del PIB (3.9% interanual) y el crecimiento real se amplió, sugiriendo una presión deflacionaria persistente e intensificada. El deflactor del PIB cayó un 1.2% interanual en el segundo trimestre, manteniéndose negativo durante nueve trimestres consecutivos, según nuestra estimación."
"Sin embargo, los datos de junio indican que el impulso interno se desaceleró desde mayo, en parte reflejando el impacto de los aranceles y el desvanecimiento del impulso anticipado. Mientras que el crecimiento de la producción industrial (IP) se aceleró a un máximo de tres meses del 6.8% interanual, el crecimiento mensual se desaceleró. Las ventas minoristas cayeron mensualmente, en parte debido a la normalización tras el impulso de las vacaciones de mayo, en nuestra opinión. Además, la inversión en activos fijos (FAI) cayó mensualmente debido a una contracción adicional en la inversión inmobiliaria, así como a un crecimiento más lento en la inversión manufacturera e infraestructura. Esperamos que el impulso del crecimiento se suavice al entrar en la segunda mitad del año, ya que las fuerzas que contribuyen al rendimiento superior acumulado hasta la fecha pueden debilitarse."
"Mantenemos nuestra previsión de crecimiento para 2025 en un 4.8% y no vemos urgencia para que los responsables de la política introduzcan estímulos adicionales dado el rendimiento superior del primer semestre. Esperamos más esfuerzos de política para estabilizar el sector de la vivienda a través de una adquisición más rápida de viviendas no vendidas y terrenos no utilizados, así como la promoción de la renovación de aldeas urbanas."