El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que mide la fortaleza del Dólar estadounidense (USD) frente a una cesta de principales divisas, sigue bajo presión al inicio de la semana, operando por debajo del nivel de 98.00 el lunes.
Han surgido nuevos riesgos geopolíticos tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump sobre amenazas arancelarias contra la Unión Europea (UE) y México durante el fin de semana.
Al mismo tiempo, los informes de que el presidente Trump está presionando al presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, para que renuncie han reavivado las preocupaciones sobre la independencia del banco central, un factor que podría influir en la confianza de los inversores y en el sentimiento del Dólar estadounidense en las próximas semanas.
El martes, se publicará el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio, proporcionando una actualización sobre la inflación en EE.UU. Independientemente de si los datos indican que las presiones inflacionarias persisten o disminuyen, es probable que tengan un impacto significativo en las expectativas de política de la Reserva Federal y, por extensión, en la trayectoria del DXY.
Mientras tanto, varias instituciones financieras importantes de EE.UU. iniciarán la temporada de ganancias del segundo trimestre, con JPMorgan Chase, Citigroup, Wells Fargo y BlackRock listos para informar. Estos resultados podrían ofrecer información importante sobre la salud del sistema financiero estadounidense, un motor clave del sentimiento de riesgo.
Gráfico diario del Índice del Dólar estadounidense (DXY)
El DXY ha protagonizado un modesto rebote desde su mínimo del 1 de julio en 96.38, pero continúa operando por debajo del nivel de resistencia psicológica de 98.00. La acción del precio está actualmente probando la media móvil simple (SMA) de 20 días en 97.70, mientras que la SMA de 50 días en 98.84 se mantiene intacta como un nivel clave de resistencia.
Ambas medias móviles están en tendencia a la baja, subrayando la perspectiva bajista más amplia.
El Índice de Fuerza Relativa (RSI) se sitúa en 49, reflejando un impulso neutral. Aunque aún no está en territorio de sobreventa, esta lectura del RSI sugiere que el Dólar actualmente carece de la fuerza para montar una reversión alcista decisiva.
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias. Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.