El Dólar estadounidense se cotiza con ligeras ganancias el miércoles, recortando pérdidas tras una caída de casi 1.30% en los dos días anteriores. Los mercados se han vuelto más cautelosos a medida que la euforia por el alto el fuego en Oriente Medio disminuye, aunque las esperanzas de los inversores de que la Fed recorte tasas en los próximos meses están limitando los intentos de alza.
El alto el fuego entre Israel e Irán se mantiene por segundo día, lo que mantiene un apetito moderado por el riesgo, pero un informe de inteligencia de EE.UU. que indica que los ataques solo habían retrasado el programa nuclear de Irán por unos meses genera dudas sobre una paz duradera.
El martes, el presidente de la Fed, Jerome Powell, resistió las llamadas del presidente Trump para un recorte de tasas y la divergencia dentro del comité de política monetaria del banco central, y confirmó que el banco central no se apresura a recortar tasas.
Powell reiteró que el banco está bien posicionado para reaccionar a un aumento muy probable en los precios cuando el impacto de los aranceles de Trump se filtre a través de la economía de EE.UU., afectando la actividad económica.
Sin embargo, los datos macroeconómicos revelaron que la economía ya está perdiendo impulso. La confianza del consumidor del Conference Board se deterioró frente a las expectativas en junio, con los consumidores cautelosos sobre el mercado laboral.
Estas cifras llegan tras una serie de publicaciones macroeconómicas pesimistas en las últimas dos semanas, que están alimentando las expectativas del mercado de que el banco recortará tasas dos veces este año. Los mercados de futuros están valorando cada vez más un recorte de 25 puntos básicos en septiembre y otro en diciembre, y esto está limitando los intentos de alza del Dólar estadounidense.
La política monetaria de Estados Unidos está dirigida por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de los precios y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos objetivos es ajustar los tipos de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal, ésta sube los tipos de interés, incrementando los costes de los préstamos en toda la economía. Esto se traduce en un fortalecimiento del Dólar estadounidense (USD), ya que hace de Estados Unidos un lugar más atractivo para que los inversores internacionales coloquen su dinero. Cuando la inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Reserva Federal puede bajar los tipos de interés para fomentar el endeudamiento, lo que pesa sobre el billete verde.
La Reserva Federal (Fed) celebra ocho reuniones al año, en las que el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) evalúa la situación económica y toma decisiones de política monetaria. El FOMC está formado por doce funcionarios de la Reserva Federal: los siete miembros del Consejo de Gobernadores, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York y cuatro de los once presidentes de los bancos regionales de la Reserva, que ejercen sus cargos durante un año de forma rotatoria.
En situaciones extremas, la Reserva Federal puede recurrir a una política denominada Quantitative Easing (QE). El QE es el proceso por el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Es una medida de política no estándar utilizada durante las crisis o cuando la inflación es extremadamente baja. Fue el arma elegida por la Fed durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos de alta calidad de instituciones financieras. El QE suele debilitar al Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso a la QE, por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a instituciones financieras y no reinvierte el capital de los bonos que tiene en cartera que vencen, para comprar nuevos bonos. Suele ser positivo para el valor del Dólar estadounidense.