La Libra esterlina (GBP) cotiza modestamente más fuerte contra el Yen japonés (JPY) el viernes, ya que el Yen sigue presionado en medio de una nueva ola de incertidumbre relacionada con el comercio. A principios de esta semana, el presidente estadounidense Donald Trump anunció aranceles amplios del 25% sobre todas las importaciones japonesas, que entrarán en vigor a partir del 1 de agosto. El anuncio ha inquietado a los mercados globales y ha disminuido el atractivo tradicional del Yen como refugio seguro. En este contexto, el GBP/JPY parece estar preparado para asegurar ganancias semanales, respaldado por la debilidad sostenida del Yen y un firme impulso alcista.
Al momento de escribir, el par cotiza alrededor de 199.10, subiendo un 0.35% en el día, después de tocar brevemente un máximo intradía de 199.45. El cruce sigue bien respaldado por encima de su media móvil simple de 20 días, que también actúa como la banda media de Bollinger, reforzando su papel como soporte dinámico. Con los precios manteniéndose cerca de los máximos del año, la estructura técnica más amplia sigue favoreciendo a los alcistas, ya que el interés comprador persistente mantiene intacta la tendencia alcista.
Desde una perspectiva de seguimiento de tendencias, el GBP/JPY ha establecido un patrón consistente de máximos y mínimos más altos, respetando los límites de un canal ascendente. Siempre que el par se mantenga por encima del soporte clave en 197.50, con la media móvil simple de 20 días ofreciendo soporte dinámico a corto plazo, la perspectiva sigue siendo constructiva. Una ruptura sostenida por debajo de este nivel podría allanar el camino hacia el 195.50 cerca del mínimo del 4 de julio.
La resistencia inmediata se observa en 199.45 (el máximo diario), seguida de la banda superior de Bollinger en 199.97 y la barrera psicológica clave en 200.00.
Los indicadores de impulso continúan apoyando en general la tendencia alcista. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) se mantiene alrededor de 60.70, permaneciendo cómodamente por encima de la marca neutral de 50, pero aún por debajo del territorio de sobrecompra, lo que sugiere que hay espacio para más ganancias antes de que el impulso se vuelva demasiado caliente. Mientras tanto, el MACD continúa exhibiendo un sesgo positivo. La línea MACD se mantiene por encima de la línea de señal, aunque el histograma está comenzando a aplanarse, lo que sugiere una posible desaceleración en el impulso si los compradores no logran superar la próxima zona de resistencia.
A corto plazo, la imagen técnica favorece un mayor alza siempre que el par se mantenga por encima de la zona de soporte de 197.50-198.00. Sin embargo, los operadores pueden querer monitorear de cerca la acción del precio cerca de la marca de 200.00, donde las señales de sobrecompra y la toma de beneficios podrían limitar las ganancias. La dirección más amplia probablemente seguirá ligada a los desarrollos geopolíticos, especialmente en torno a las relaciones comerciales entre EE. UU. y Japón y cualquier posible represalia de Tokio.