El cruce EUR/JPY registra ganancias modestas cerca de 166.80 durante la sesión europea temprana del miércoles. La reducción de las apuestas por una subida de tasas del Banco de Japón (BoJ) socava al Yen Japonés (JPY) y actúa como un viento favorable para el cruce.
Técnicamente, la perspectiva constructiva del EUR/JPY se mantiene ya que el cruce está bien respaldado por encima de la media móvil exponencial (EMA) clave de 100 días en el gráfico diario. El impulso alcista se refuerza por el Índice de Fuerza Relativa (RSI), que se sitúa por encima de la línea media cerca de 66.00, mostrando un impulso alcista en el corto plazo.
En el lado positivo, la primera barrera alcista para el cruce surge en 167.75, el límite superior de la Banda de Bollinger. Una ruptura decisiva por encima de este nivel podría ganar más impulso y apuntar a 168.02, el máximo del 26 de julio. Más al norte, el siguiente nivel de resistencia se observa en el nivel psicológico de 170.00.
En el caso bajista, el mínimo del 16 de junio en 166.02 actúa como un nivel de soporte inicial para el EUR/JPY. Una ruptura de este nivel podría arrastrar al cruce hacia 164.22, el mínimo del 6 de junio. El filtro adicional a la baja a vigilar es 162.89, el mínimo del 5 de junio.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.