El par EUR/USD tiene dificultades para capitalizar las fuertes ganancias registradas en los dos últimos días y oscila dentro de un rango estrecho durante la sesión europea del martes. El par se mueve en torno a 1.0850, prácticamente sin cambios en el día y justo por debajo de los máximos de una semana alcanzados el día anterior.
Los inversores parecen reacios y prefieren esperar a los eventos clave de los bancos centrales de esta semana antes de abrir posiciones direccionales agresivas, lo que, a su vez, lleva al par EUR/USD a cotizar dentro de un rango moderado. El testimonio del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, ante el Congreso el miércoles y el jueves se tendrán en cuenta para obtener pistas sobre la senda de recortes de tasas. Esto, junto con la decisión de política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) del jueves, ayudará a determinar la trayectoria a corto plazo del par.
Aparte de esto, esta semana los inversores se enfrentarán a la publicación de importantes datos macroeconómicos de EE.UU. programados para principios de un nuevo mes, incluyendo los detalles mensuales de empleo, o el informe de nóminas no agrícolas (NFP) del viernes. Mientras tanto, la reducción de las expectativas a un rápido recorte de los tipos de interés por parte del BCE sigue actuando como un viento favorable para la moneda común. El Dólar estadounidense, por su parte, se ve debilitado por las expectativas de que la Fed comience a recortar los tipos en junio, lo que presta soporte al par EUR/USD.
Sin embargo, el ligero deterioro de la confianza en el riesgo mundial, que se refleja en un tono más suave en los mercados bursátiles, beneficia al Dólar de refugio seguro, y limita la subida del par. Por lo tanto, es prudente esperar a que se produzcan fuertes compras antes de posicionarse en el par EUR/USD, que ha repuntado desde niveles inferiores a 1.0700, es decir, el mínimo de tres meses alcanzado el 14 de febrero. Lo