El rendimiento de la Libra esterlina (GBP) sigue siendo mediocre durante la sesión europea del lunes, ya que los inversores parecen haberse quedado al margen antes de los anuncios de tipos de interés por el Banco de Inglaterra (BoE) y la Reserva Federal (Fed). El par GBP/USD cotiza en un rango estrecho cerca de 1.2700, mientras se espera que los inversores hagan sus apuestas tras los anuncios de política monetaria de esta semana.
Los participantes del mercado ven al BoE manteniendo los tipos de interés sin cambios en el 5.25% por cuarta vez consecutiva, ya que la inflación subyacente en el Reino Unido más que duplica la tasa deseada del 2%. Los participantes del mercado estarán muy atentos a las perspectivas de tasas de interés que ofrezca el banco central.
La primera decisión sobre los tipos de interés de 2024 se prevé difícil para los responsables políticos del BoE, ya que la inflación se ha mostrado más obstinada de lo esperado y cada vez es más probable que se produzca una recesión técnica. El gasto del consumidor se ha visto duramente afectado por la agudización de la crisis del coste de la vida. Las posibilidades de una recesión aumentarían si el BoE ofrece una orientación de línea dura.
La Libra esterlina oscila cerca de 1.2700 frente al Dólar estadounidense antes de los anuncios clave de política monetaria a ambos lados del Atlántico. El par GBP/USD oscila dentro del rango del viernes de 1.2675-1.2758, lo que indica una fuerte contracción de la volatilidad. En un marco de tiempo diario, el par demuestra un largo ajuste entre los participantes minoristas y los inversores institucionales. La media móvil exponencial (EMA) de 20 días cerca de 1.2700 se solapa con el rango operativo actual del par, lo que se suma a la evidencia de que los inversores se han mantenido al margen de cara a la semana repleta de datos.
La Libra esterlina (GBP) es la moneda más antigua del mundo (886 d.C.) y la moneda oficial del Reino Unido. Es la cuarta unidad de divisas más negociada del mundo, con un 12% de todas las transacciones y una media de 630.000 millones de dólares al día, según datos de 2022.
Sus pares de divisas clave son el GBP/USD, también conocido como "Cable", que representa el 11% del mercado de divisas, el GBP/JPY, o el "Dragón", como lo conocen los operadores (3%), y el EUR/GBP (2%). La libra esterlina es emitida por el Banco de Inglaterra (BoE).
El factor más importante que influye en el valor de la Libra esterlina es la política monetaria que decide el Banco de Inglaterra. El Banco de Inglaterra basa sus decisiones en la consecución de su objetivo principal de "estabilidad de precios", es decir, una tasa de inflación estable en torno al 2%. Su principal herramienta para lograrlo es el ajuste de los tipos de interés.
Cuando la inflación es demasiado alta, el Banco de Inglaterra intenta contenerla subiendo los tipos de interés, lo que encarece el acceso al crédito para particulares y empresas. Esto suele ser positivo para el GBP, ya que unos tipos de interés más altos hacen del Reino Unido un lugar más atractivo para que los inversores mundiales aparquen su dinero.
Cuando la inflación es demasiado baja, es señal de que el crecimiento económico se está ralentizando. En este escenario, el BoE considerará bajar los tipos de interés para abaratar el crédito, de modo que las empresas pidan más prestado para invertir en proyectos que generen crecimiento.
Los datos publicados calibran la salud de la economía y pueden influir en el valor de la Libra esterlina. Indicadores como el PIB, los PMI manufactureros y de servicios, y el empleo pueden influir en la dirección de la Libra esterlina.
Una economía fuerte es buena para la Libra esterlina. No sólo atrae más inversión extranjera, sino que puede animar al Banco de Inglaterra a subir los tipos de interés, lo que fortalecerá directamente a la Libra esterlina. De lo contrario, si los datos económicos son débiles, es probable que la libra esterlina caiga.
Otro dato significativo para la libra esterlina es la balanza comercial. Este indicador mide la diferencia entre lo que un país gana con sus exportaciones y lo que gasta en importaciones durante un periodo determinado.
Si un país produce exportaciones muy solicitadas, su divisa se beneficiará exclusivamente de la demanda adicional creada por los compradores extranjeros que desean adquirir estos bienes. Por lo tanto, una balanza comercial neta positiva fortalece una moneda y viceversa para una balanza negativa.