El cruce EUR/JPY cotiza en una nota positiva cerca de 172.40 durante los primeros compases de la sesión europea del lunes, impulsado por una mejora en el apetito de riesgo. Sin embargo, los comentarios de línea dura del gobernador del Banco de Japón (BoJ), Kazuo Ueda, podrían fortalecer al Yen japonés (JPY) y limitar el alza del cruce.
Ueda del BoJ habló en un panel celebrado el sábado durante la conferencia anual de la Reserva Federal en Jackson Hole, Wyoming, diciendo que se espera que los salarios en su país permanezcan bajo presión alcista debido a un mercado laboral ajustado. Sus comentarios señalaron su optimismo de que las condiciones para otra subida de tasas de interés estaban tomando forma.
Técnicamente, la perspectiva constructiva del EUR/JPY se mantiene ya que el cruce está bien respaldado por encima de la media móvil exponencial (EMA) clave de 100 días en el gráfico diario. El impulso alcista se refuerza por el Índice de Fuerza Relativa (RSI), que se sitúa por encima de la línea media cerca de 55.75, sugiriendo que un mayor alza parece favorable.
En el lado positivo, la primera barrera alcista para el cruce surge en 173.15, el límite superior de la Banda de Bollinger. Cualquier compra adicional por encima de este nivel podría allanar el camino hacia el nivel de resistencia crucial en la zona de 173.90-174.00, representando el máximo del 28 de julio y el nivel psicológico.
En el caso bajista, el nivel de soporte inicial para el EUR/JPY se observa en 171.12, el mínimo del 20 de agosto. Una ruptura de este nivel podría arrastrar al cruce hacia 170.45, el límite inferior de la Banda de Bollinger. El siguiente nivel de contención se encuentra en 170.00, la cifra redonda.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.