El miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), Klaas Knot, declaró el domingo que el BCE necesitará pruebas de la ralentización del crecimiento salarial en la eurozona antes de poder bajar las tasas de interés.
"Ahora tenemos una perspectiva creíble de que la inflación volverá al 2% en 2025".
"La única pieza que falta es la convicción de que el crecimiento salarial se adaptará a una menor inflación".
"En cuanto esa pieza del rompecabezas encaje, podremos bajar un poco las tasas de interés".