El par USD/CHF opera en una nota positiva alrededor de 0.7965 durante la sesión europea temprana del viernes. El optimismo en torno a los acuerdos comerciales de EE.UU. proporciona cierto apoyo al Dólar. Sin embargo, el potencial alcista para el par podría estar limitado, ya que los mercados podrían volverse cautelosos antes de eventos cruciales la próxima semana.
El Wall Street Journal (WSJ) informó el viernes que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ahora está persiguiendo negociaciones con China. Trump podría cambiar de una estrategia de presión a la negociación, con el objetivo de asegurar un acuerdo económico que aumente el acceso de EE.UU. a los mercados chinos, particularmente en negocios y tecnología. Estos desarrollos positivos alivian los temores de tensiones comerciales entre las dos economías más grandes del mundo y debilitan la moneda de refugio seguro, como el Franco suizo (CHF).
El jueves por la noche, Trump aumentó la presión sobre el presidente de la Fed, Jerome Powell, con una visita a las oficinas de la Fed en Washington. Trump y Powell discutieron los costos de las renovaciones en curso en la sede de la Fed. Cualquier movimiento sorpresivo que escale las tensiones entre la administración y el banco central de EE.UU. podría arrastrar al Dólar estadounidense (USD) a la baja frente al CHF en el corto plazo.
Los pedidos de bienes duraderos de EE.UU. para junio se publicarán más tarde el viernes. Todas las miradas estarán puestas en la reunión de política monetaria del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) la próxima semana. Se anticipa que el FOMC mantenga la tasa sin cambios en su reunión de julio, ya que los responsables de la política prefieren esperar claridad sobre el impacto esperado de los aranceles en la inflación. Los mercados financieros han descontado casi un 60% de probabilidad de un recorte de tasas de 25 puntos básicos (pbs) en septiembre, según la herramienta FedWatch del CME.
El Franco suizo (CHF) es la moneda oficial de Suiza. Se encuentra entre las diez monedas más negociadas a nivel mundial, alcanzando volúmenes que superan con creces el tamaño de la economía suiza. Su valor está determinado por el sentimiento general del mercado, la salud económica del país o las medidas adoptadas por el Banco Nacional Suizo (SNB), entre otros factores. Entre 2011 y 2015, el Franco suizo estuvo vinculado al Euro (EUR). La vinculación se eliminó abruptamente, lo que resultó en un aumento de más del 20% en el valor del franco, lo que provocó una turbulencia en los mercados. Aunque la vinculación ya no está en vigor, la suerte del franco suizo tiende a estar altamente correlacionada con la del euro debido a la alta dependencia de la economía suiza de la vecina eurozona.
El Franco suizo (CHF) se considera un activo de refugio seguro, o una moneda que los inversores tienden a comprar en épocas de tensión en los mercados. Esto se debe a la percepción que se tiene de Suiza en el mundo: una economía estable, un sector exportador fuerte, grandes reservas del banco central o una postura política de larga data hacia la neutralidad en los conflictos globales hacen que la moneda del país sea una buena opción para los inversores que huyen de los riesgos. Es probable que los tiempos turbulentos fortalezcan el valor del CHF frente a otras monedas que se consideran más riesgosas para invertir.
El Banco Nacional Suizo (BNS) se reúne cuatro veces al año (una vez cada trimestre, menos que otros bancos centrales importantes) para decidir sobre la política monetaria. El banco aspira a una tasa de inflación anual inferior al 2%. Cuando la inflación supera el objetivo o se prevé que lo superará en el futuro previsible, el banco intentará controlar el crecimiento de los precios elevando su tipo de referencia. Los tipos de interés más altos suelen ser positivos para el Franco suizo (CHF), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, los tipos de interés más bajos tienden a debilitar el CHF.
Los datos macroeconómicos publicados en Suiza son fundamentales para evaluar el estado de la economía y pueden afectar la valoración del Franco suizo (CHF). La economía suiza es estable en términos generales, pero cualquier cambio repentino en el crecimiento económico, la inflación, la cuenta corriente o las reservas de divisas del banco central tienen el potencial de desencadenar movimientos en el CHF. En general, un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y un alto nivel de confianza son buenos para el CHF. Por el contrario, si los datos económicos apuntan a un debilitamiento del impulso, es probable que el CHF se deprecie.
Como economía pequeña y abierta, Suiza depende en gran medida de la salud de las economías vecinas de la Eurozona. La Unión Europea en su conjunto es el principal socio económico de Suiza y un aliado político clave, por lo que la estabilidad de la política macroeconómica y monetaria en la eurozona es esencial para Suiza y, por ende, para el Franco suizo (CHF). Con tal dependencia, algunos modelos sugieren que la correlación entre la suerte del euro (EUR) y el Franco suizo es superior al 90%, o casi perfecta.