El cruce AUD/JPY atrae a algunos compradores hacia alrededor de 95.45 durante la sesión europea temprana del viernes. La incertidumbre sobre el probable momento de la próxima subida de tipos de interés por parte del Banco de Japón (BoJ) sigue arrastrando al Yen Japonés (JPY) a la baja y actúa como un viento favorable para el cruce.
Técnicamente, el AUD/JPY reanuda su sesgo alcista a medida que el precio cruza por encima de la media móvil exponencial (EMA) de 100 días en el gráfico diario. Sin embargo, no se puede descartar una mayor consolidación, con el índice de fuerza relativa (RSI) de 14 días rondando la línea media. Esto sugiere un impulso neutral a corto plazo.
El primer objetivo al alza a tener en cuenta para el cruce se observa en la región de 96.00-96.10, el nivel psicológico y el máximo del 19 de agosto. Las ganancias extendidas podrían ver un repunte hacia 96.75, el máximo del 13 de agosto. Más al norte, el siguiente obstáculo se sitúa en 97.10, el límite superior de la Banda de Bollinger.
Por otro lado, cualquier venta de seguimiento por debajo de la EMA de 100 días de 95.10 podría ver una caída a 94.40, el mínimo del 20 de agosto. El trading sostenido por debajo del nivel mencionado podría exponer 93.97, el mínimo del 1 de julio. El filtro adicional a la baja a tener en cuenta es 93.36, el mínimo del 16 de junio.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.