El Banco de México (Banxico) reveló las actas de la reunión de política monetaria del 7 de agosto, en la que el banco central decidió reducir las tasas en 25 puntos básicos (pbs) a 7.75% con una votación dividida, con el subgobernador Jonathan Heath a favor de mantener las tasas sin cambios.
Las actas mencionaron que la inflación cayó a 3.51% en julio y el crecimiento económico se mantuvo moderado a pesar del leve repunte en el segundo trimestre de 2025, como las principales razones detrás de la decisión de la institución mexicana.
Junto a esto, el banco central citó que la apreciación del Peso Mexicano en 2025 está ayudando a contener la inflación en medio de tensiones comerciales y la incertidumbre arancelaria.
Además de esto, la junta señaló que "considerarán recortes adicionales a la tasa de referencia." Sin embargo, dependería de las dinámicas de inflación, a pesar de que Banxico ve los riesgos de inflación inclinados al alza.
El Banco de México, también conocido como Banxico, es el banco central del país. Su misión es preservar el valor de la moneda mexicana, el Peso mexicano (MXN), y fijar la política monetaria. Para ello, su principal objetivo es mantener una inflación baja y estable dentro de los niveles objetivo –en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%.
La principal herramienta de Banxico para orientar la política monetaria es la fijación de las tasas de interés. Cuando la inflación se sitúa por encima de la meta, el banco intentará controlarla subiendo las tasas, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas y, por lo tanto, enfría la economía. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN. El diferencial de tasas con el Dólar, o la forma en que se espera que Banxico fije las tasas de interés en comparación con la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), es un factor clave.
Banxico se reúne ocho veces al año y su política monetaria está muy influenciada por las decisiones de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Por ello, el comité de toma de decisiones del banco central suele reunirse una semana después de la Fed. De esta manera, Banxico reacciona y en ocasiones se anticipa a las medidas de política monetaria fijadas por la Reserva Federal. Por ejemplo, después de la pandemia de Covid-19, antes de que la Fed subiera las tasas, Banxico lo hizo primero en un intento de disminuir las posibilidades de una depreciación sustancial del Peso mexicano (MXN) y evitar salidas de capital que pudieran desestabilizar al país.