La subgobernadora del Banco de Canadá (BoC), Sharon Kozicki, advirtió el jueves que un número creciente de empresas canadienses se está preparando para una desaceleración general en la actividad en los próximos meses, lo que podría socavar el rendimiento del crecimiento del empleo y ejercer presión a la baja sobre la economía canadiense.
Las empresas y asociaciones fueron aquellas particularmente afectadas por las tensiones comerciales.
Las últimas consultas se llevaron a cabo de mediados de abril a mediados de mayo, después de una ronda anterior en enero.
Algunas empresas y asociaciones industriales consultadas por el BoC antes de la decisión sobre tasas del 4 de junio creen que los peores escenarios de aranceles son mucho menos probables de materializarse.
Las empresas hablaron sobre el aumento de costos, lo que probablemente significa que necesitarán aumentar los precios en algún momento.
Aunque la incertidumbre sigue siendo alta, hubo menos conversaciones sobre resultados catastróficos.
Las empresas han comenzado a ver impactos concretos en su rendimiento y están encontrando difícil formular perspectivas.
Muchas empresas esperan que la actividad se debilite a corto plazo, lo que pone en riesgo los empleos.
El CG del BoC consideró esta información junto con otros datos y análisis al decidir mantener la tasa de política sin cambios.
El BoC está confiando más en datos y encuestas no tradicionales, así como en la divulgación, para obtener una mejor comprensión de cómo está funcionando la economía.