El Dólar estadounidense (USD) comienza la semana con cierto retroceso. A primera hora de la mañana del lunes aparecieron algunas presiones de venta en Asia, antes de una semana cargada de datos. Esta semana tan ajetreada en el calendario macroeconómico viene acompañada de la ausencia de discursos por parte de los funcionarios de la Reserva Federal (Fed) de EE.UU., ya que se encuentran en su periodo de veda antes de la decisión de tasas del 31 de enero.
En el frente económico, los elementos principales llegarán el jueves y el viernes, con las cifras del Producto Interior Bruto (PIB) de EE.UU. y el Índice de Precios del Gasto en Consumo Personal (IPC), la medida de inflación preferida de la Fed. Respectivamente el Banco Central Europeo (BCE) y su Presidenta, Christine Lagarde, también decidirán el jueves sobre su política monetaria. Hasta entonces, el lunes nos espera un comienzo de semana muy tranquilo, sin grandes datos económicos programados.
El Índice del Dólar estadounidense (DXY) se enfrenta a una importante presión vendedora. El gráfico diario muestra un tercer día consecutivo con máximos y mínimos más bajos. Esto apunta a un aumento de la presión vendedora, mientras que el DXY no logra mantenerse por encima de los importantísimos niveles técnicos de la media móvil simple (SMA) de 200 días en 103.47 y la SMA de 55 días en 103.28.
Hay algunos datos económicos que todavía podrían servir de argumento para que el DXY vuelva a superar esas dos medias móviles y se escape. Vemos 104.44 como primer nivel de resistencia al alza, en la forma de la SMA de 100 días. Si eso también se dispersa, nada impedirá que el DXY se dirija a 105.88 o 107.20, el máximo de septiembre.
Una trampa alcista parece estar en marcha, donde los alcistas del Dólar fueron sorprendidos comprando en el Dólar cuando rompió por encima de la SMA de 55 días y la de 200 días en el comercio de la semana pasada. Los precios podrían caer sustancialmente y obligar a los alcistas a vender sus posiciones con pérdidas. De este modo, el DXY caería primero hasta 102.60, en la línea de tendencia ascendente desde septiembre. Una vez por debajo, el DXY puede retroceder hacia 102.00.
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés.
Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.