El Peso mexicano recuperó terreno el martes frente al Dólar estadounidense mientras los operadores digerían las últimas cifras de la Balanza Comercial de Estados Unidos (EE.UU.), que mostraron que el déficit comercial se amplió. Una agenda económica escasa en México mantiene a los operadores a la espera de la publicación de cifras de inflación y de la reunión de política monetaria del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de EE.UU. el miércoles. Al momento de escribir, el USD/MXN se cotiza a 19.67$, con una caída del 0.08%.
El apetito por el riesgo sigue deprimido antes de la reunión del FOMC. Las políticas comerciales de EE.UU. continuaron acaparando los titulares, ya que el presidente estadounidense Trump dijo que está abierto a imponer aranceles bajos y justos a los socios que busquen evitar mayores impuestos. Agregó: "Va a ser un número muy justo, será un número bajo. No estamos buscando perjudicar a los países."
Trump añadió que está dispuesto a comenzar conversaciones para renegociar el acuerdo de libre comercio T-MEC en una reunión con el primer ministro canadiense Mark Carney.
El Peso mexicano se disparó tras los comentarios de Trump, con el USD/MXN recortando ganancias anteriores y volviéndose negativo en el día. Mientras tanto, los operadores esperan la publicación del informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de México el 8 de mayo. Esto sigue a un ligero aumento en el informe de inflación a mediados de abril, que mostró un aumento en los precios, aunque se mantuvo dentro del objetivo de inflación del 3% más o menos 1% del Banco de México (Banxico).
La Balanza Comercial de EE.UU. reveló que el déficit de EE.UU. se amplió más de lo esperado, según el Departamento de Comercio de EE.UU.
Desde una perspectiva técnica, el USD/MXN mantiene un sesgo a la baja. Recientemente, el par exótico no logró superar la media móvil simple (SMA) de 20 días en 19.78, lo que indica que los vendedores están a cargo a corto plazo. El impulso de los compradores parece estar desvaneciéndose, como lo indica el Índice de Fuerza Relativa (RSI), lo que sugiere que se avecina una consolidación.
Si el USD/MXN supera el mínimo del año hasta la fecha (YTD) de 19.43, esto podría allanar el camino hacia la cifra psicológica de 19.00. En caso de mayor debilidad, el siguiente soporte sería el máximo del 28 de junio convertido en soporte en 18.59.
Por el contrario, si el USD/MXN sube por encima de 19.78, se espera una prueba de la SMA de 200 días en 19.98. Una ruptura de esta última expondrá el nivel de 20.00.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.