El Peso mexicano (MXN) se mantuvo firme frente al Dólar estadounidense (USD), aunque está preparado para terminar la semana con pérdidas de más del 0.40% después de que los datos económicos revelados en México pintaron un sombrío panorama económico, a pesar de que la economía creció sorprendentemente en el primer trimestre de 2025. Además, los sólidos datos de empleo de EE.UU. que moderan los temores de recesión mantuvieron al USD/MXN cerca de la marca de 19.58 prácticamente sin cambios.
La agenda económica de México reveló que la confianza empresarial se deterioró por tercer mes consecutivo en abril. Al mismo tiempo, S&P Global reveló que la actividad manufacturera para el mismo período se desplomó a su nivel más bajo en tres años, contrayéndose por cuarto mes consecutivo según el índice PMI manufacturero.
Al otro lado de la frontera, las noticias comerciales positivas entre EE.UU. y China limitaron las ganancias del par USD/MXN mientras el Dólar estadounidense registró algunas pérdidas. En el frente de datos, las Nóminas no Agrícolas de abril superaron las estimaciones y fueron inferiores a la lectura anterior. Junto a esto, la Tasa de Desempleo se mantuvo estable, destacando la robustez del mercado laboral estadounidense.
Se espera que la Reserva Federal (Fed) mantenga las tasas sin cambios en la reunión de la próxima semana. Por el contrario, el Banco de México (Banxico) ha señalado sus intenciones de continuar flexibilizando la política monetaria en su reunión de mayo para apoyar la economía, a pesar de que la inflación no ha alcanzado el objetivo del 3%. Por lo tanto, la divergencia entre ambos bancos centrales podría presionar al Peso y mejorar las perspectivas del Dólar estadounidense.
La tendencia a la baja del USD/MXN se mantiene, aunque la reciente acción del precio sugiere un posible fondo alrededor del rango de 19.46–19.50. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) se mantiene plano cerca del nivel 30, señalando un agotamiento de los vendedores.
Una caída por debajo del mínimo del año hasta la fecha en 19.46 expondría el nivel psicológico de 19.00, y una mayor debilidad podría llevar a una prueba del máximo del 28 de junio convertido en soporte en 18.59.
Por otro lado, un movimiento por encima de la SMA de 20 días en 19.88 y la SMA de 200 días cerca de 19.97 cambiaría el momentum a favor de los compradores, abriendo la puerta para recuperar la marca de 20.00, seguida por la SMA de 50 días en 20.12.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.