Toyota ha comenzado la producción de baterías en su nueva planta de 13.900 millones de dólares en Liberty, Carolina del Norte.

Toyota ha comenzado a fabricar baterías en Estados Unidos por primera vez. El miércoles, la compañía confirmó el inicio de la producción en su nueva planta de baterías de 13.900 millones de dólares en Liberty, Carolina del Norte, una instalación que se convierte oficialmente en la primera fábrica de baterías propia del fabricante fuera de Japón.

Al mismo tiempo, Toyota anunció que invertiría 10.000 millones de dólares adicionales en sus operaciones en Estados Unidos durante los próximos cinco años, además de lo ya previsto, sin ofrecer más detalles.

Tetsuo Ogawa, director ejecutivo de Toyota Motor North America, describió el momento como “crucial” para la compañía, vinculando el comentario directamente con la apertura del nuevo sitio.

La fábrica, anunciada originalmente en diciembre de 2021, surgió del impulso de la administración Biden para trasladar la producción de baterías para vehículos híbridos y eléctricos de vuelta a suelo estadounidense.

Desde aquel anuncio, el entusiasmo por los vehículos eléctricos se ha enfriado, pero los híbridos (donde Toyota domina) han experimentado un auge de popularidad.

Toyota reacciona al cambio del mercado, las normas sobre vehículos eléctricos y los aranceles de Trump.

A medida que el mercado de vehículos eléctricos pierde impulso, Toyota se encuentra en una posición privilegiada. Datos de Motor Intelligence revelan que la compañía ahora ostenta una cuota de mercado superior al 51% en las ventas de vehículos híbridos en EE. UU., un segmento que crece a un ritmo mayor del esperado.

Mientras otras compañías intentan corregir sus estrategias centradas exclusivamente en vehículos eléctricos, la apuesta de Toyota por los híbridos está dando sus frutos. No está claro cuánto de estos nuevos 10.000 millones de dólares ya estaba previsto antes de este anuncio, pero la compañía lo hizo oficial pocas semanas después de que Donald Trump afirmara que Toyota invertiría 10.000 millones de dólares en Estados Unidos si volvía a la Casa Blanca.

Mientras tanto, las automotrices se ven afectadas por dos frentes: por un lado, las nuevas regulaciones para vehículos eléctricos y, por otro, la ola de aranceles impuestos durante la administración Trump a autopartes y vehículos. Toyota aún se encuentra en medio de esta situación. Sin embargo, a pesar del caos, la compañía registró un aumento del 9,9 % en sus ventas en Estados Unidos durante el tercer trimestre, con 1,3 millones de vehículos vendidos en ese período.

La planta de baterías en Liberty es ahora una pieza clave de la estrategia de Toyota en Estados Unidos. Según la compañía, la instalación en Carolina del Norte generará más de 5100 nuevos empleos en el condado de Randolph. Funcionarios estatales estuvieron presentes en el evento de inauguración el miércoles, incluido el gobernador Josh Stein, quien declaró :

“Hoy celebramos un progreso histórico: Toyota amplía su producción de baterías aquí mismo en Carolina del Norte… Esta inversión sin precedentes creará más de 5.000 nuevos puestos de trabajo para los habitantes de Carolina del Norte y fortalecerá nuestra economía de energía limpia.”

Don Stewart,dent de Toyota North Carolina, añadió: “Este es un momento emocionante para Toyota, la región y el estado de Carolina del Norte. Este importante hito refleja nuestro compromiso continuo con los miles de habitantes de Carolina del Norte que Toyota empleará y con el futuro crecimiento económico de la región de Triad”.

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